El cardenal Leopoldo Brenes ofició este Jueves Santo, en la Catedral de Managua, la misa que rememora la Última Cena, con un homilía en la que repudió la “chismografía”, y calificó de “terrorista” a quien lanza chismes.
Brenes calificó de “terrorista” a quien lanza el chisme y destruye a muchas personas, y “él se escapa libremente y queda tranquilo”.
“La chismografía es un terrorismo”, sostuvo.
El cardenal invitó a los sacerdotes a “dejar a un lado las inundaciones que, no dudo, son del demonio, metiendo la cizaña para romper esa unidad, esa comunión entre ustedes, y quizá muchas veces entre nosotros los obispos”.
Brenes pidió a los sacerdotes, que hoy renovaron votos, que sean “misericordiosos”, y recordó que el papa Francisco convocará oficialmente el Jubileo de la Misericordia el próximo sábado, 11 de abril, en la Basílica de San Pedro del Vaticano, con la publicación de la bula de convocatoria del Año Santo de la Misericordia.
“Tendremos tiempo para poner nuestro sacerdocio desde ese espíritu de ser misericordiosos”, señaló.
En este sentido, el cardenal dijo que una de las cosas que rompe ese ambiente de misericordia, y que tiene que desaparecer es la “chismografía”, que “eso no ayuda”.
Asimismo, Brenes recordó a Juan Pablo II, papa que falleció un 2 de abril de hace diez años, y quien, según dijo durante la homilía, “manifestó un cariño muy especial por Nicaragua”.
“Durante los tiempos difíciles (Juan Pablo II) siempre estuvo cercano (…)” a Nicaragua, expresó Brenes.
El alto jerarca anotó que Juan Pablo II “en dos ocasiones tuvo la delicadeza de visitarnos”, la primera en marzo de 1983, cuando en este país centroamericano gobernaba el régimen sandinista en medio de una guerra civil.
“La última vez, en 1996, estuvo aquí con nosotros en esta iglesia catedral, estuvo orando a los pies de la imagen de la sangre de Cristo y nos puso bajo su protección”, señaló.
El sacerdote también recordó que fue Juan Pablo II quien le nombró arzobispo de Managua poco antes de su fallecimiento.
“Su amor por esta iglesia arquidiocesana la quiso hacer efectiva prácticamente 41 horas antes de partir al encuentro del Padre, nombrando al cuarto arzobispo de esta iglesia (…), encomendándome el pastoreo”, expuso el cardenal.
Brenes presidió así su segundo Jueves Santo desde que fue investido cardenal de Nicaragua por el papa Francisco el 22 de febrero de 2014.
La ceremonia fue celebrada en la Catedral de Managua, situada en un espacio abierto rodeada de árboles y palmeras, donde resaltan las 63 cúpulas que componen su techo.
Con la ceremonia del jueves Santo se conmemora la Última Cena y la oración de Cristo en el huerto de Getsemaní, que estuvo sucedida por su arresto y posterior calvario.
