Maduro prepotente en la ONU
Una vez más el presidente Maduro abre su “bocota” y sin siquiera dudarlo se presenta en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), ante los periodistas, como lo que es: un gobernante autoritario, sin clase, prepotente y patán.
Un cable con fecha del 28 de julio, procedente de la agencia de noticias EFE, informó entre otras cosas que el presidente venezolano Nicolás Maduro llegó a la ONU para tratar sobre el conflicto que ha surgido entre Venezuela y Guyana por la zona del Esequibo y defender la necesidad de una mediación por parte del organismo mundial.
Sin embargo, la razón de su viaje no fue la noticia que se destacó en las redes sociales, pues Nicolás Maduro, ante las preguntas de algunos periodistas sobre la posibilidad de que la ONU estuviera como observadora en las próximas elecciones parlamentarias, descartó toda posibilidad de que esto ocurra como veremos a continuación.
La nota explica que “el presidente venezolano, Nicolás Maduro, descartó hoy la posibilidad de que observadores internacionales supervisen las elecciones legislativas de diciembre y dijo que Venezuela “no es monitoreada ni será monitoreada por nadie”. “No lo aceptaremos jamás, por nadie”, dijo Maduro, preguntado por la posibilidad de que los comicios cuenten con vigilancia por parte de alguna organización como las Naciones Unidas.
La nota periodística añade que “el presidente venezolano se expresó así un día después de que el dirigente opositor Henrique Capriles pidiese al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, que designe observadores para las elecciones de diciembre. “Venezuela no es monitoreada ni será monitoreada por nadie”, subrayó Maduro, en declaraciones a los periodistas, tras reunirse en la sede de la ONU con el secretario general de la organización, Ban Ki-moon.
Carlos Vílchez Navamuel
Hoy celebran, mañana llorarán
Pocos días atrás se conmemoró el 36 aniversario de la revolución popular sandinista, la gesta histórica que derrocó a la dinastía de los Somozas, que costó la muerte de al menos treinta mil nicaragüenses aproximadamente, dejando una patria destruida material y emocionalmente, miles de jóvenes muertos, sangre de hermanos nicaragüenses derramada sobre nuestro territorio, madres llorando la muerte de sus hijos. ¿Y todo esto para qué?
Nos quitamos el yugo de Somoza y su guardia opresora, para que en la actualidad tengamos otro, ahora del dictador Daniel Ortega y su policía orteguista. El derecho a la libertad de expresión está siendo pisoteado para quienes están en contra de un gobierno que en vez de sembrar árboles que den oxígeno, siembra “Árboles de la vida”, hojalatas que cuestan veinte mil dólares. ¿Cuántas escuelas no se construirían con todo ese dinero que se ha gastado en “plantar esos árboles”? ¿Cuántas familias no se ayudarían con ese dinero? Para qué ir tan lejos, ¿cuántos kilómetros de Nicaragua no reforestaríamos con esos miles de dólares que se han sacado de los bolsillos de la población nicaragüense, para sembrar árboles de lata, que además tendremos que seguir pagando esa luz con nuestros impuestos?
Fue triste ver que el 19 de julio, en la plaza se veían más banderas rojinegras que banderas azul y blanco, aunque se supone que es una fiesta patriótica, no una fiesta partidaria. Muchos dirán que la plaza se llena por patriotismo, pero muchos llegan para tomar licor, otros por el simple hecho de que su ausencia costaría sus trabajos y solo una pequeña minoría por el sentido histórico y patriótico de dicha fecha.
Como es costumbre, Ortega da su discurso contra el imperialismo, un discurso tan gastado y repetitivo que todos los nicaragüenses nos lo sabemos de memoria. Lo más chistoso es que Ortega, recientemente compró dos Mercedes Benz que cada uno cuesta 280 mil dólares más, cien mil dólares del blindaje; y claramente este exagerado gasto no sale de sus bolsillos, sino que sigue saliendo de nuestros bolsillos, al igual que los árboles de la vida. En un país tan pobre donde hay personas que viven con menos de dos dólares al día, el multimillonario presidente derrocha el dinero del país en gastos extravagantes, dinero que podría ser invertido en salud o educación, que son los peores sistemas del país.
Hablando en materia de democracia y libertad de expresión, es normal que veamos represión y una justicia totalmente parcializada a favor del actual Gobierno. Los atropellos a la libertad de expresión son tantos que esta carta no alcanzaría para mencionarlos.
Ortega y sus simpatizantes hoy celebran, pero mañana llorarán las atrocidades que están haciendo con nuestro país, con nuestra democracia, con nuestra libertad de expresión. Pero es seguro que a todo dictador le llega su 19 de julio. Si el pueblo nicaragüense tuvo el valor de derrocar a Somoza, ¿qué le hace pensar a Ortega que él no será el siguiente?
Jorge Marcelino Cáceres
36 años de dictadura
El recién pasado 19 de julio el orteguismo celebró 36 años de dictadura, acercándose a los 46 años de la dictadura somocista y convirtiéndose el orteguismo en la prolongación del Somocismo. Esto significa que cumplimos 82 años de dictadura en Nicaragua, como consecuencia el atraso económico, social y político.
En su perorata Ortega no hizo mención del crimen de Las Jagüitas ni de la crisis económica del pueblo de Nicaragua, porque su gobierno carece de un proyecto económico. La campaña de propaganda del Canal se acabó porque es inviable, porque significaría la contaminación del lago Cocibolca, la fuente de agua más grande de Centroamérica.
El Gobierno no ha podido presentar el estudio porque seguramente demuestra que la construcción del Canal afectaría las aguas del lago Cocibolca, lo cual sería un crimen de lesa humanidad, dejar a nuestra patria sin el vital líquido necesario para la sobrevivencia.
Es por eso que el presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Ortiz, pidió al Gobierno de Nicaragua, los estudios que garanticen la no contaminación de nuestro lago Cocibolca, debido a que los pobladores costarricenses vecinos sacian su sed en sus aguas.
Sin embargo, un diputado de la oposición que parece desconocer la realidad, criticó por eso al presidente de Costa Rica.
Luis Solórzano
Escándalo en Planned Parenthood
Un gran escándalo ha surgido en torno a Planned Parenthood, la asociación a la que se acusa de que en tres años ha perpetrado un millón de abortos en Estados Unidos (EE. UU.), receptora diaria de 1.4 millones de dólares y que a su vez apoyó con 1.7 millones de dólares la reelección de Obama.
Una cámara oculta desveló que, lo que ellos llaman engañosamente tejido fetal, son en realidad órganos (ojos, piernas, hígados, pulmones, corazones ) de bebés de gestaciones más avanzadas, cuyos abortos son dirigidos sin aplastarlos con el fórceps, de modo que puedan servir lo más intactos posible al comprador. Posteriormente son vendidos para diversos usos, empaquetados con hielo seco, y enviados por correo urgente.
Planned Parenthood se lucra de la desgracia ajena, del trauma de la madre que reniega de su maternidad y sobre todo de la del hijo, revendido por partes, después de mutilarlo como en una carnicería tras ser arrancado del seno materno. Pero lo más sorprendente es que sea la transacción y no el hecho mismo de matar al hijo lo que haya causado asombro.
Vivimos en un mundo tan deshumanizado que tenemos que volver la vista a los animales y a aprender de ellos, a querer al hijo que en nosotras se gesta, a no rechazar la vida y a cuidar de la prole aún a costa de un alto sacrificio.
Eva N. Ferraz, España
Ver en la versión impresa las páginas: 11 A
