Además de incumplir el compromiso de publicar en octubre la metodología que se usó en la revisión hacia atrás de las cifras económicas, para entender el cambio brusco que sufrió la estructura de la economía, el Banco Central de Nicaragua (BCN) ha decidido retrasar por casi dos meses y sin explicación clara el informe de las Cuentas Nacionales al segundo trimestre de este año y un mes el Índice Mensual de la Actividad Económica (IMAE) de agosto, información que no había sido publicada al menos hasta ayer al cierre de esta edición.
En el calendario anticipado de divulgación de información económica, disponible en el portal electrónico del Banco Central de Nicaragua, inicialmente se tenía previsto que el informe de las Cuentas Nacionales del segundo trimestre se publicara el 21 de septiembre.
BCN SE RESISTE
Luego, según denunció el economista Adolfo Acevedo, el BCN lo reprogramó para el 1 de octubre. Al no cumplir ese compromiso, las autoridades del Banco Central prometieron publicarlo el 19 de octubre, lo que tampoco cumplieron. Posteriormente, se reprogramó para el 28 de octubre y al no cumplir ahora dicen que lo harán el 13 de noviembre.
Igual situación ocurre con el IMAE de agosto, el que se tenía previsto que se publicara este mes, pero ahora se hará público el 13 de noviembre junto con el correspondiente a septiembre.
¿Por qué se resiste el BCN a publicar las Cuentas Nacionales al segundo trimestre? Acevedo teme que los números de este informe, que generalmente recoge el comportamiento trimestral de los principales indicadores económicos que integran el PIB, demuestren “los resultados de la frenética labor de revisión” en las Cuentas Nacionales que el BCN ha hecho en el período 2010-2014.
“Cabe preguntarse por qué el BCN está tan preocupado por publicar las Cuentas Nacionales del segundo trimestre de 2015, qué mostrarían estas nuevas revisiones”, enfatiza.
Acevedo recuerda que siendo la información pública un bien de la nación y de los ciudadanos, “los funcionarios que administran estos sistemas no están facultados, bajo ninguna circunstancia, para comportarse con ánimo de dueño, y decidir a su entero y total arbitrio, respecto a los mismos”.
No obstante, denuncia que “si nos atenemos a los hechos, desde hace meses el BCN decide de manera discrecional y antojadiza la información que publica y la que no, y cuándo la publica, si acaso se digna a hacerlo”.
LA JUSTIFICACIÓN DE REYES
El pasado 29 de octubre durante la conferencia de fin de la visita de la misión del Fondo Monetario Internacional en el marco del Artículo IV, LA PRENSA le consultó al presidente del BCN, Ovidio Reyes, por qué el retraso de la publicación del informe de las Cuentas Nacionales Trimestrales, a lo que respondió: “Respecto al tema del ciclo, yo les he dicho, y les dije la vez anterior, que esos temas también los vemos nosotros en la mesa de producción, con los sectores productivos, cuando hayamos terminado esa revisión, entonces nosotros procederemos a hacer las explicaciones y las proyecciones respectivas”.
Y añadió: “Recordemos que todo esto resulta del modelo de diálogo y consenso del Gobierno con los sectores, y a ellos les preguntamos cómo ven los avances de la producción en el futuro y sobre esa base hacemos los ajustes y correcciones”.
Al insistirle en que la consulta iba dirigida sobre el retraso de las Cuentas Nacionales y no el de producción agrícola, Reyes dijo: “Es lo mismo”.
El Banco Central tiene sin actualizar, al menos hasta el cierre de esta edición, también los indicadores mensuales de producción minera correspondientes a la minería metálica (oro y plata). También los indicadores sectoriales correspondientes a la producción agrícola, específicamente los referidos a la producción de maíz, frijol, arroz, café, sorgo y ajonjolí.
Reyes tampoco explicó por qué no cumplió su promesa del 6 de agosto de publicar en octubre la metodología que se usó para cerrar una “discrepancia” por casi mil millones de dólares que se abrió en las Cuentas Nacionales y la Balanza de Pagos, por el registro incorrecto de las importaciones de zona franca.
BCN NECESITA RESCATAR SU CAPACIDAD
El presidente de Consultores para el Desarrollo Empresarial (Copades), Néstor Avendaño, espera que la información sea publicada a más tardar la próxima semana. De no hacerse, la institución “seguirá perdiendo capacidad, no solamente de publicar, sino de recibir la información económica de parte de los distintos organismos estatales”.
“Si no se publican la próxima semana es que hay algo más serio en el manejo de las cifras”. Con la autoridad que le otorga ser un economista formado en el BCN, Avendaño invita “al colega Ovidio Reyes a que solicite al presidente de la República una sola cosa: que el Banco Central rescate su autoridad para recopilar, procesar, criticar y publicar la información económica del país”, para que vuelva a ser “la cabeza del sistema nacional de información económica del país”.
El economista considera que para evitar conjeturas y especulaciones, cuando se presenten retrasos en el calendario de publicaciones “el Banco no debe guardar silencio, sino salir a explicar el porqué de estos”.
Avendaño también advierte que el retraso no es solamente con la información actual, ya que desde el 2012 se desconocen los datos anuales del empleo por actividad económica y eso es grave. “Me pregunto cómo podemos analizar y proponer políticas para elevar la productividad, saber cómo está la productividad”, y dicho retraso lo atribuye a que el Instituto Nacional de Información de Desarrollo (Inide) no pasa información al BCN.
Avendaño reconoce que antes se presentaban algunos atrasos, pero no tan “profundos” como los actuales. “Por ejemplo no había buenas relaciones entre el Banco Central y Hacienda y los datos fiscales iban atrasados”, dice Avendaño.
Sin embargo, ahora el “problema es que esto ya se está generalizando. Por ejemplo, aquí desconocemos datos de producción de la minería metálica y de todas las ramas industriales. Ahora solo publican índices, que no dicen nada y que no sirven para ningún inversionista que trata de determinar cuál es la capacidad de producción del país”, afirma el economista.
Además, lamenta que “la calidad de la información se ha deteriorado. Datos de la agricultura en el limbo, que no conocemos desde hace tiempo. O sea, tenemos un deterioro progresivo en la recopilación, crítica, procesamiento y publicación de los datos oportunamente”.
FMI DEJA RECOMENDACIÓN
En el comunicado de cierre de la misión del FMI en Managua, el mensaje al Banco Central sobre el manejo de las estadísticas fue claro: “Las autoridades necesitan continuar fortaleciendo el marco estadístico. Eso incluye la ampliación de la cobertura institucional de las cuentas fiscales y de deuda pública, y el reforzamiento de las metodologías para compilar las cuentas nacionales y externas. La misión también recomienda continuar con el fortalecimiento de los mecanismos para mejorar la recolección de datos; los procedimientos para monitorear la calidad de las estadísticas; y la estrategia de comunicación”.
AFECTA TOMA DE DECISIONES
Para Juan Sebastián Chamorro, director ejecutivo de la Fundación Nicaragüense de Desarrollo Económico y Social (Funides), el atraso en la publicación de los datos genera dificultades, especialmente al sector empresarial que requiere de dicha información para hacer sus proyecciones.
Según Chamorro, “sobre todo en esta parte del año genera dificultades al sector privado, que está haciendo sus proyecciones de ventas, presupuestos y actividades para el 2016”, ya que sin estos datos “cuesta más saber por dónde va la economía”. Además, Funides considera que “debe haber un calendario de publicaciones que debe ser observado”.
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