Muchas prácticas que comúnmente uno realiza con los dientes pueden tener serias consecuencias en la dentadura. Algunas tan simples como comer hielo pueden ser perjudiciales en el largo plazo.
• No use los dientes como herramientas para abrir botellas, pues eso puede fracturarlos o desgastarlos rápidamente.
• Otra forma de desgastar los dientes es cortando hilos. Se recomienda que se utilice una tijera para cortar en lugar de hacerlo con la dentadura.
• Rechinar los dientes o apretarlos en exceso podría aflojar los dientes y desgastar su superficie. También afecta la articulación de la mandíbula.
• Está contraindicado comerse las uñas. Además que esto puede darle una mala apariencia a las manos, también puede provocarte bruxismo, una condición en la que se rechinan o se aprietan los dientes inconscientemente, aun cuando se duerme.
• Hay que evitar comer gomitas dulces, pues estas se quedan pegadas a los dientes durante horas y desgastan el esmalte de los dientes, en todo caso se recomienda cepillarse después de comerlas.
• Aunque parezca un hábito inofensivo, masticar hielo puede provocar fisuras o quebrar los dientes.
• El efecto de morder un lápiz es similar al del hielo. Por eso se recomienda no hacerlo.
• Hay que buscar un cepillo suave para lavarse los dientes, pues uno con cerdas duras o cepillarse con mucha fuerza puede provocar retracción de las encías y exceso de sensibilidad en ellas.
• Los dientes deben cepillarse con movimientos circulares, si los cepilla horizontalmente desgastará el esmalte.
• También hay que evitar el uso excesivo de blanqueadores para los dientes, pues también provoca desgaste del esmalte.
Ver en la versión impresa las paginas: 13