Con el Sínodo Extraordinario de la familia a pocos días de iniciar, el papa Francisco recordó que a lo largo de la historia, siempre ha sido “la clase dominante que tiene que cerrar las puertas a la manera en que Dios quiere salvarnos”.
Francisco invitó a los fieles congregados en la Casa de Santa Marta, a creer en la salvación, proclamada por Jesús en lugar de “vagar en busca de gurúes”.
“Todo lo que Dios quiere es salvar a la humanidad, pero el problema es que los seres humanos a menudo quieren dictar las normas de la salvación”. “Esto explica los intensos intercambios que Jesús tiene con la clase dominante de su época”. Papa Francisco.
Francisco enumeró las actitudes de la clase dominante en tiempos de Jesús: “Ellos argumentan, tratan de engañarlo y que le permiten a cabo debido a que se resisten a su oferta de salvación”. Jesús les dice: “¡No te entiendo! Eres como esos niños que dicen Tocamos la flauta, y ustedes no bailaron; cantamos endechas, y no habéis llorado. ¿Qué quieres?”
“Ellos quieren, dijo el papa, para salvarse a sí mismos y siguen cerrados a la manera del Señor”. La salvación viene a través de la misericordia y el perdón, no a través del sacrificio. “El drama de su resistencia a la salvación” es que quieren salvarse a sí mismos su “propia manera”.
“¿Cómo quiero ser salvo? Por una espiritualidad que es bueno para mí, pero estática, explica por sí mismo y sin ningún riesgo? O por lo divino, por Jesús que siempre nos sorprende, que siempre nos abre las puertas al misterio de la omnipotencia de Dios de la que es la misericordia y el perdón?”
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