Los últimos minutos del comerciante Dervin Sobalvarro Baldelomar, quien desapareció el pasado 4 de septiembre y fue encontrado el 17 de octubre en estado de descomposición en una quinta de Esquipulas, en el kilómetro 12.3 carretera a Masaya, fueron agónicos y dolorosos.
El dictamen del Instituto de Medicina Legal (IML) reveló este jueves que el cuerpo de Sobalvarro presentaba signos de violencia física con arma blanca (machete) y con objetos contusos, recibidos en el cráneo, tórax y abdomen.
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Sobalvarro, de 48 años, salió de su negocio en el mercado Iván Montenegro, a bordo de su camioneta, con dirección a su vivienda en carretera Nueva a León, pero nunca llegó. El vehículo apareció abandonado en la comunidad Las Pilas, en la carretera hacia El Crucero, Managua.
Pruebas ante el juez
El dictamen forense conclusivo, más el peritaje de unas botas halladas en la casa de uno de los presuntos asesinos, que tenían tierra semejante al lugar donde fue encontrado el cuerpo, son las nuevas pruebas que presentó este jueves la Fiscalía ante el juez, contra los acusados del secuestro, robo y asesinato del comerciante.
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La Fiscalía dijo que tiene pendiente un análisis de relaciones de llamadas que hicieron los acusados entre sí, antes, durante y después de los hechos. Pese que los abogados defensores se opusieron a la petición de la Fiscalía, el juez Cuarto Distrito Penal de Juicio, Carlos Silva, admitió las pruebas.
Para el próximo 8 de marzo de 2018, fue programado el inicio del juicio contra los asesinos del comerciante Dervin Sobalvarro.