La Policía Nacional liberó entre el domingo y este lunes a 15 ciudadanos que fueron detenidos este fin de semana en los municipios de Granada y Diriá, por participar de las marchas azul y blanco, organizadas por autoconvocados para protestar contra el gobierno de Daniel Ortega.
Los familiares se emocionaron al ver sus parientes salir de la estación policial. Sin embargo, otro grupo de padres de familia se quedaron para saber de sus detenidos, pese a que las autoridades no les dan información.
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“Mi esposo fue detenido en la calle cuando andaba comprando licor la madrugada del viernes. Supe que está bien golpeado”, dijo la esposa del detenido, quien tiene más de 48 horas preso.
Sacerdotes acompañan a familiares
Los sacerdotes de los templos de Xalteva y San Pedro, en Diriá, acompañaban a los familiares de los detenidos. El padre Mario Jarquín, párroco de Diriá, dijo que de ese municipio detuvieron a 18 personas, de los que han liberado a seis. En tanto, de los 20 detenidos de Granada, dijo que solamente nueve fueron liberados.
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“Nos dijeron (los policías) que de los 11 detenidos que aún quedan de Granada cinco van a ser procesados”, dijo Jarquín.
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De la lista de detenidos que circula en Granada una es mujer y el resto varones. Este lunes los grupos de antimotines se mantuvieron vigilante en el barrio Arroyo Carita, mientras la Alcaldía mandó a poner adoquines en las calles donde habían sido retirados por los jóvenes para hacer barricadas.