Esperar mucho no es una de las cualidades para Jerson Ortiz. En el boxeo ser paciente sobre el cuadrilátero trae más perjuicios que beneficios. Y el nicaragüense de 24 años no quiso dejar correr el tiempo. Apenas sonó la campana del primer asalto buscó como tomar el botín en Panamá, en la casa de Azael Villar, ranqueado número cuatro en la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) en las 105 libras. Ortiz lanzó su primer golpe de izquierda en cruzado y se estrelló con el rostro del canalero, cayendo a la lona. Todos asombrados hasta el propio Ortiz, quien triunfó noqueando en el primer round.
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A Villar las piernas y la ayuda del réferi le dio tiempo suficiente para levantarse, no le hizo un conteo justo, sino que cada segundo tardaba una eternidad. No obstante, estaba desorientado y Ortiz esperando la aprobación para terminar la pelea. Salió nuevamente con sus combinaciones huracanadas con la derecha en volado y la izquierda en cruzado. Esos dos golpes los metió multiplicado por tres a la humanidad de Villar, quien volvió a tocar la lona.
¡No más señaló el réferi!
Ya olía a muerto. El nicaragüense se dirigió a una esquina del ring y esperó otro conteo con su mirada puesta en la presa: todo un cazador. Villar se levantó pero estaba perdido en algún agujero negro. Cuando se puso de pie, inmediatamente sintió que le movían el piso, el público giraba como una rueda de la fortuna y se veía que no podía sostenerse, debido a eso se iba hacia atrás a buscar como reclinarse en las sogas. Ya no había manera de protegerlo y el réferi Iván Ballestero tuvo que detener el combate.
Una victoria importante, pero aún más fundamental en la confianza y en regresarle el ánimo perdido a Ortiz, quien se consideraba un prospecto a seguir años atrás, pero su primera derrota le arrebató la seguridad. “Sabía que lo tenía y quise rematarlo con todo y la ayuda del réferi. Gracias a Dios y tuve ese olfato de rematador. La idea era noquear porque en Panamá difícilmente ganaría por puntos”, confesó Ortiz.
Después del triunfo, Carlos Ortega excampeón plata del Consejo Mundial de Boxeo retó al pinolero: “Si me vuelven a invitar con gusto. Peleando con los mejores es que se avanza”, dijo el joven pinolero, luego de sumar su triunfo 13 y quinto nocaut. Ortega es conocido por enfrentar en el país a Byron Rojas, pero perdió por decisión unánime.