Uno de esos imputados es Ronald Fernando Avilés Liebol. El 5 de octubre pasado, Avilés salió de su casa para ir a una fiesta de cumpleaños con una joven con la que él se comunicaba por messenger.
Un taxi pasó por él. Lo recogió cerca de su casa, en Managua. Cuando Avilés se subió al vehículo, ya estaba a bordo un paramilitar, según le contó a su madre varios días después de ser apresado.
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