Luego que entre julio de 2018 y el pasado enero las relaciones entre el dictador Daniel Ortega y el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) se mantuvieron en su punto más bajo, el jueves reciente, el jefe de gabinete de Luis Almagro apareció en Managua invitado por Ortega para sostener “conversaciones exploratorias” sobre la situación del país.
Aunque las posiciones de ambas partes parecen permanecer aún muy lejos, la breve y hermética visita solo coincidió en dejar la puerta abierta al diálogo. Un cambio de actitud significativo después que durante seis meses —entre junio y enero pasados— no hubo contactos, y el distanciamiento fue tal que en septiembre de 2018 Almagro llamó a “asfixiar la dictadura de Ortega” y este llegó pedir la renuncia de Almagro.
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Al retirarse la misión encabezada por el jefe de gabinete de Almagro, Gonzalo Koncke, tanto la OEA como el Gobierno de Nicaragua emitieron comunicados sobre el tema.
De ambos, lo único que se puede concluir es que el canal de comunicación se ha reabierto, aunque todavía existen grandes diferencias sobre los puntos torales como los presos políticos, los delitos que se han cometido durante la represión, el diálogo nacional y el adelanto de las elecciones
OEA pide sacar a reos políticos, Ortega dice “no”
Según el comunicado de la OEA, “la delegación planteó la liberación de los presos políticos, la necesidad de contar con avances en el proceso político electoral y la importancia de considerar las recomendaciones del Sistema Interamericano”.
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El comunicado de la OEA indica que en lo que respecta a los presos políticos, el Gobierno expresó que “las personas detenidas han sido objeto del debido proceso”.
En el comunicado de la Cancillería de Nicaragua ni siquiera se menciona el tema de los reos políticos, pero sí propuso revisar reformas electorales “con la intención de fortalecer el proceso electoral”, aunque mantuvo su posición de que las elecciones presidenciales se realicen en 2021, cuando vence su período.
Tomando distancia de la posición del régimen, la Secretaría de la OEA le responde a Ortega en el comunicado que “aguardará en este sentido la eventualidad de poder proseguir las negociaciones en el marco de la agenda propuesta por la Secretaría General, al tiempo que se acordó el mantenimiento de un canal de comunicación a tales efectos”.
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Ni una palabra sobre las recomendaciones del Sistema Interamericano
Otro punto en el que los comunicados parecían referirse a reuniones distintas es el de la petición de la OEA de “considerar las recomendaciones del Sistema Interamericano”, o sea, el informe del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) que determinó que durante la represión el régimen cometió delitos de lesa humanidad, las resoluciones del Consejo Permanente para que Ortega reanude el diálogo nacional, los informes de la CIDH, entre otros.
El comunicado del Gobierno no se refirió a este tema.
El gobierno enfrenta condiciones adversas
A pesar que en este primer encuentro, al menos en público, el Gobierno se ha hecho de la vista gorda sobre las demandas en las que coinciden tanto la comunidad internacional como la oposición interna, la posición del régimen es más débil hoy que hace unas seis semanas.
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Por un lado, las sanciones del Gobierno de Estados Unidos ya no solo han tocado a funcionarios del Gobierno sino a la principal fuente de ingresos de la familia Ortega-Murillo, como es el conglomerado Albanisa, así como el Banco Corporativo (Bancorp), que según declaró en su momento el exsuperintendente de Bancos, Víctor Urcuyo, es propiedad de Albanisa.
Además, Estados Unidos tiene sobre la mesa la posibilidad de denunciar el tratado de libre comercio, Cafta, en lo que respecta a Nicaragua, y ya está aprobada la Ley Nica, que impedirá que la dictadura tenga acceso a las más grandes fuentes multilaterales de financiamiento.
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Pero si eso no fuera ya una posición incómoda, el Parlamento Europeo y el Consejo Permanente de la OEA han dado su respaldo a las conclusiones del GIEI, mientras el principal aliado de Ortega, el dictador venezolano Nicolás Maduro, tiene un futuro dudoso. Todo esto mientras Nicaragua inicia un año en el que la economía se podría contraer hasta en un 10 por ciento, según estimaciones de la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides).
A Ortega se le acaba el tiempo
Para el general en retiro y opositor a Ortega, Hugo Torres, el hecho que el Gobierno haya llamado a la OEA “significa que Ortega está viendo que se le acaba el tiempo para una negociación menos grave para sus intereses, por eso toma la iniciativa de llamar a la OEA”.
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Asimismo, Torres señaló que el comunicado de la OEA además de claro, demuestra que no viene a negociar a la libre.
“El comunicado de la OEA es muy claro, y cuidado, porque señala que en el marco de actuación de la OEA y en el contexto de los mandatos e instrumentos jurídicos correspondientes, eso significa que no viene a conversar o negociar por la libre con Ortega, sino en el marco acordado por el Consejo Permanente y la OEA en todo sus órganos respecto a Nicaragua”, resaltó Torres.
Contradicción en comunicado orteguista
El militar retirado explicó, por otro lado, que el comunicado del gobierno orteguista es una contradicción.
“Es una contradicción total ese comunicado del régimen porque invita a venir a la OEA y, por otro lado, trata de aparecer como bravucón ante sus bases. Ortega está en una gran contradicción con respecto a sus bases, porque se ve obligado por la situación de aislamiento internacional a tener que negociar, porque el tiempo le es adverso, y también no puede parecer débil ante sus bases”, consideró Torres al valorar la reanudación de charlas de Ortega con la OEA.
Legitimidad y condiciones en la negociación
Torres también fue claro al señalar la legitimidad de una futura negociación y las condiciones para que esta se lleve a cabo, para superar la crisis sociopolítica que afecta a Nicaragua ante la ola represiva del régimen orteguista contra la ciudadanía que le ha pedido se vaya del poder a través de comicios anticipados.
“Ninguna negociación va a tener legitimidad si no participa la representación del pueblo a través de la Unidad Azul y Blanco y la Alianza Cívica, y toda negociación arrancará con la liberación de todos los presos políticos, el cese de la represión y ponerle fecha a las elecciones adelantadas”, apuntó Torres, también miembro del MRS.
Sin confianza en Ortega
El exdiplomático y analista político José Dávila, al valorar el encuentro de Ortega con la delegación de la OEA, consideró que “no trae nada nuevo”.
Dávila considera que Ortega mantiene sus posiciones para intentar ganar tiempo.
“No quiere hablar de diálogo nacional ni elecciones adelantadas, y solo si cayera (Nicolás) Maduro (en Venezuela) se podría mover un poco hacia lo que necesita el país y demanda la sociedad: una apertura democrática que rompa el estancamiento autoritario en que estamos”, manifestó un experto en política exterior.
Mientras que la política opositora y miembro de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), Violeta Granera, manifestó que cualquier negociación con Ortega tiene que pasar por la liberación de los presos políticos, el cese a la represión y la salida de él del poder.
“Ortega pretende que la OEA le saque las castañas del fuego y empujar su pretensión de mantenerse en el poder hasta el 2021. Por eso los llamó (a la OEA). Pero en realidad con esta jugada demuestra que sabe que se terminó su tiempo. El pueblo de Nicaragua no va a aceptar nada menos que la libertad de los presos políticos; el cese a la represión con garantías para que regresen los exiliados y elecciones adelantadas en condiciones de respeto al voto”, afirmó Granera, también defensora de derechos humanos.
La opositora explicó que en Nicaragua, así como la comunidad internacional, se sabe que el país “no puede sobrevivir más tiempo y que la salida de Ortega debe ser ya”.
Ultimátum de europeos a Ortega
El presidente del Parlamento de la Unión Europea (UE), Antonio Tajani, envió el último jueves una fuerte carta al dictador Daniel Ortega, en la que le reclama por no garantizar la integridad física de los reos políticos, como lo acordaron durante la visita de los parlamentarios europeos el mes pasado, cuando estuvieron en el país, visitaron las cárceles y escucharon las denuncias de los detenidos en relación a las violaciones de los derechos humanos por parte del régimen orteguista.
“Le anuncio que el Parlamento Europeo hará pública su condena y pedirá asimismo a la Unión Europea que actúe en consonancia con la gravedad de la situación que se vive en Nicaragua. Si el régimen no da muestras concretas de que se respetan las tres peticiones que le han sido solicitadas, habrá pronto medidas”, dijo Tajani en la misiva que hizo pública en su cuenta de Twitter y donde anuncia directamente la advertencia de sanciones europeas.