Sus seguidores, amistades y admiradores la recordarán siempre como la carismática, sonriente y mujer luchadora, a la presentadora de televisión, actriz y empresaria Myriam Hebé González Montealegre, quien la tarde de este viernes dio su último suspiro en el Hospital Militar, así lo confirmó una de las muchachas que la cuidó hasta sus últimos días.
Su hijo Diego Ramírez González, manifestó que su madre, quien en abril de este año cumplió 80 años, falleció a las 4:00 p.m., de enfermedad natural y en estos momentos no maneja donde serán velados sus restos, pues lo están coordinando con la familia.
“Me encantará escribir mis memorias antes que me llame Dios y como dicen los chinos digo: nadie puede decir que ha vivido si no ha sembrado un árbol y escrito un libro”, expresó en una entrevista concedida a La Prensa en enero del 2016.
González Montealegre, nacida en Chinandega un 17 de abril de 1939, luchó con positivismo por su salud, por la educación social, la cultura en todas sus expresiones y su nuevo proyecto de escribir sus andanzas en el teatro, cine, televisión, de sus viajes, y como mujer emprendedora.
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Dama de la televisión nicaragüense
Elogiada como la “Dama distinguida de la televisión nicaragüense”, Hebé tiene el mérito de ser pionera en la presentación de las revistas y de crear su propio formato narrativo con temas abiertos, pero también de reivindicación de la mujer y como dice jovialmente “con locura azul”.
Su carrera la inicia en el teatro en los años sesenta, la necesidad de trabajar en algo que le retribuyera ingresos la empuja a buscar otro camino: abrir un programa en la Radio Corporación.
Visitó al empresario Felipe Mántica, y este le sugirió la televisión.
Todos los sábados
“Entonces me fui donde Octavio Sacasa Valle y me abrió las puertas; así nació el programa Media hora con ustedes, y era transmitido el sábado una vez a la semana”, contó para entonces Hebé.
Mantenerse al aire fue su gran reto. Sacasa Sarria le hizo un plan de ventas para buscar patrocinio y así poder competir con Julio Vivas Benard, en el canal de competencia, el 6.
“Él tenía más de cien anunciantes y yo solo cinco, hasta que poco a poco mejoró; pero sigo diciendo que esta es una sociedad de machistas”, reclamó Hebé lo que considera deben ser los derechos de las mujeres en los espacios.
Años después dio a conocer Aquí Myriam Hebé, dos veces por semana, logrando mantener audiencia y permanecer desde 1967 a 1978.
Recuerda que entrevistó a cantantes como Rocío Durcal, Roberto Carlos, Julio Iglesias y políticos como Pedro Joaquín Chamorro Cardenal.
Durante el gobierno de Violeta Barrios de Chamorro regresó a las cámaras, estuvo unos meses en el Canal 6, en transmisiones de mediodía con su programa Aquí Myriam Hebé, comenta Ximena Ramírez González, hija de Hebé.
Dos generaciones frente a las camáras
Una llamada de Vivian Fernández de Pellas la hizo retornar de nuevo a la televisión, en esta ocasión al Canal 14, revela Hebé. Luego se entrevistó con Vivian Vanessa Pellas e hizo un casting junto a su hija Ximena.
“Y propusimos hacer dos generaciones, madre e hija, cada una contando sus historias, pero no sabíamos cómo le íbamos a poner; entonces Vivian Vanessa dijo: ‘Con locura azul’ por supuesto. Así nació esta revista”.
Sobre su célebre frase “Los amo con locura azul”, Hebé cuenta la utilizaba al despedirse de cada transmisión. Y lo del tono azul, lo relaciona, al primer libro de Rubén Darío, al mar, al cielo, al poema Ventana de Alfonso Cortés, al azul de la bandera, y al “color eléctrico”, que es de amor, alegría y humor.
Con este ánimo las dos generaciones de madre e hija, Hebé y Ximena, entrevistaron a diversas personalidades del mundo político, cultural, empresarial del país.
El teatro y sus logros
Con su personaje de la Criada en la obra teatral La casa de Bernarda Alba, del poeta Federico García Lorca, la joven Myriam Hebé hace su debut en 1963, dirigida por Adán Castillo.
Para estos años era una asidua visitante de la Escuela de Bellas Artes; su director era Rodrigo Peñalba quien tenía el espacio del Teatro Experimental de Bellas Artes (TEBA), donde lograron poner en cartelera varias obras.
“Me fascinaba el teatro y me dije: esta será mi carrera, mi pasión”, confiesa Hebé, al iniciar en las artes escénicas.
Luego participó en La Zorra y las Uvas, fábula atribuidas a Esopo, recontada por Babrio, Fedro, Jean de La Fontaine y Félix María Samaniego.
Después en Puerta Cerrada, pieza del teatro existencialista escrita por Jean-Paul Sartre. Tiempo después hizo Bernarda, personaje principal de La casa de Bernarda Alba.
“Myriam deslumbró a todos por su belleza y juventud. La recuerdo vestida de rojo, tacones altos y cabello al viento, en el casting para ser parte del reparto de la Chinfonía Burguesa que realizó Luis Martínez Concepción, de Actors Studio de Nueva York”, comentó por su lado el actor Hugo Hernández Oviedo, su excolega.
Su talento la llevó a ser parte activa del elenco del Teatro Experimental de Managua (TEM), en el cual figuraron las actrices Adelita Pellas de Solórzano, Pina del Carmen, Gloria Pereira de Belli, Gladys Ramírez de Espinosa, Mimi Hammer, Tina Benard de Chamorro, entre otras.
Para el escritor Róger Mendieta Alfaro, Hebé y las otras actrices del TEM, promovieron un “teatro de calidad social y artística”. Hebé también visitaba la Cafetería La India, un espacio frecuentado por periodistas, poetas y pintores.
Hebé también fue dirigida por Jaime Alberdi, Esteban Isvegy. Y últimamente por Erasmo Alizaga en el monólogo Oscar y la mama Rosa, del escritor francés Eric-Enmanuel Schmitt, donde interpretó a siete personajes. Esta obra fue presentada en marzo del 2010, en la Sala Mayor del Teatro Nacional Rubén Darío.