La oposición política de Nicaragua tiene como principal objetivo sacar del poder a la dictadura de Daniel Ortega. Las siguientes son las acciones más evidentes que vienen implementando con ese objetivo.
La exigencia de reformas electorales
En los últimos meses la oposición promovió el debate alrededor de las propuestas de reforma electoral. El sistema electoral es totalmente controlado por el partido gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), por lo cual no es confiable participar en un eventual proceso de votación con la misma estructura electoral y con las mismas reglas. Al menos cuatro organizaciones opositoras hicieron sus propuestas de reforma electoral.
La Alianza Cívica, la Unidad Nacional Azul y Blanco y el Grupo Pro Reformas Electorales son tres de las organizaciones que presentaron propuestas. El siguiente paso es consensuarla, para presentar una en común. A la vez, Daniel Ortega prepara su propuesta de reforma de manera unilateral.
Mantener protestas
Otra de las estrategias son las protestas en demandan de justicia y libertad. Las manifestaciones masivas de ciudadanos fueron aplastadas el año pasado a punta de ataques armados de la dictadura de Daniel Ortega. Aún así, grupos de ciudadanos organizados siguen saliendo a las calles bajo el riesgo de la represión y violencia con la que contesta la dictadura orteguista, a través de la Policía y grupos armados.
Estudiantes universitarios, feministas, excarcelados, madres, padres y familiares de asesinados –agrupados en la Asociación Madres de Abril (AMA)–, son los grupos que más hacen convocatorias de manifestaciones, la mayoría de veces en lugares privados como iglesias católicas, universidades, restaurantes, bancos o empresas, donde puedan resguardarse. Pero también hay grupos que toman más riesgo saliendo a protestar en la vía pública, como Juventud por el Cambio Democrático, que encabeza la líder opositora Zayda Hernández.
Organización y unidad política
Las organizaciones políticas que surgieron en abril de 2018, entre estas la Alianza Cívica y la Unidad Nacional Azul y Blanco, están impulsando un proceso de unidad con otros grupos opositores y partidos políticos, para formar una gran coalición de cara a un eventual proceso electoral.
En ese sentido, la Alianza Cívica emitió este lunes, 4 de noviembre, un comunicado en el que indica que se reunirá con diversos actores nacionales.
“La Alianza Cívica realizará reuniones con diversos movimientos sociales, movimientos políticos, partidos políticos, sectores económicos, gremiales y territoriales para exponerles nuestra posición sobre los elementos fundamentales de dicha coalición. Estos encuentros tienen como finalidad intercambiar ideas sobre la conformación de la coalición opositora. Igualmente se abordarán temas sobre las reformas electorales necesarias para llevar a cabo elecciones transparentes, confiables, seguras y adelantadas”, manifiesta el comunicado.
También, el partido político Ciudadanos por la Libertad, encabezado por Kitty Monterrey, dio a conocer este lunes un Consejo de Asesores que apoyará a esta organización política en la búsqueda de la unidad de la oposición. El grupo de asesores está integrado por Humberto Belli, Bosco Matamoros y Arturo Cruz.
El reto de todos los sectores opositores es apartar sus intereses políticos e individualismos, para formar un bloque cohesionado, que se enfrente a Ortega.
Denuncia internacional
La oposición organizada denuncia constantemente ante la comunidad internacional las violaciones de derechos humanos que se viven en el país desde el 18 de abril de 2018, cuando comenzó la represión contra las protestas civiles. Más de 328 personas murieron por la represión, según un informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Una de las últimas denuncias formales fue ante la comisión de la Organización de Estados Americanos (OEA), creada con el mandato de buscar una salida negociada a la crisis que vive el país.
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