Fue una dura batalla legal que duró dos años completos, pero finalmente doña Paola Obando Castillo (madre de la quinceañera Rechel Rostrán Obando) siente un poco de alivio porque ve como los asesinos de su hija poco a poco pagan por su horrendo crimen.
Primero, después de más de 25 reprogramaciones de juicio, por fin se integró un jurado que declaró culpable a Walter Darbelles Jiménez, responsable del asesinato ocurrido el 20 de enero de 2017, en el barrio Sol de Libertad, en Managua.
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Y ahora la Policía logró la captura en la frontera sur del sujeto Maykel Prado y/o Maykel Antonio Cano, quien ayudó a cavar el hoyo y echar aún con vida a la quinceañera, a la que después le echaron tierra, basura y otros desechos. El sujeto pretendía huir hacia Costa Rica.
Prado es acusado como encubridor del asesinato de la adolescente. Se conoce que fue capturado el 11 de octubre pasado en la frontera con Costa Rica.
Falta uno
Doña Paola dijo desconocer del paradero de Guillermo Cuarezma, el otro encubridor del crimen de su hija Rechel Rostrán. Este sujeto, según la Fiscalía, fue el que prestó a Walter Darbelles la barra, palas y otras herramientas para cavar el hoyo y sepultar a Rostrán. Cuarezma también ayudó a cavar la fosa.
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Doña Paola Obando Castillo, cuando declaró en el juicio que se le hizo a Walter Darbelles, comentó que la última vez que vio con vida a su hija Rechel Rostrán Obando fue a las 7:20 de la noche del 19 de enero de 2017.
Después se enteró de su paradero cuando la osamenta de la adolescente fue encontrada el 29 de junio de 2017 en un casa del barrio Sol de Libertad y no dudó que se trataba de su hija por una pulsera color celeste que estaba a la orilla de la osamenta.
También la reconoció porque en el lugar donde estaba la osamenta había un bikini color negro y un brasier color rojo quemado, que recién le había comprado a la adolescente.
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