El régimen de Daniel Ortega manifestó su “preocupación y consternación” este viernes a través de un comunicado por la operación dirigida este jueves por el gobierno de los Estados Unidos, donde fue asesinado el jefe de la Fuerza de la Guardia Revolucionaria iraní, Qasem Soleimani, en Bagdad, capital de Irak.
En su comunicado, el régimen orteguista respaldó además “el planteamiento del Gobierno Soberano de Irak, que reclama violación de su Soberanía Nacional”. El régimen además secundó la postura de Irán, catalogando como “terrorismo internacional” la muerte de Soleimani.
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La dictadura orteguista también pidió, argumentando ser parte de las Naciones Unidas, “acciones serias, responsables y creíbles, que tomen en cuenta el extremo riesgo que corremos como civilización”, en referencia a la escalada de tensión entre Estados Unidos e Irán.
Ortega es uno de los principales aliados de Irán en Latinoamérica. El 10 de enero de 2012, cuando juró para su segundo mandato consecutivo de cinco años en Nicaragua, el líder sandinista respaldó el programa nuclear iraní, mismo que Estados Unidos considera “amenaza para el mundo”. Ortega también pidió en esa ocasión a Israel que se desarmara para evitar un conflicto militar.
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