Es psicólogo y profesor y tiene 44 años. Cuando se habla de minificciones es obligatorio mencionar a Alberto. Ha publicado libros de literatura infantil, juvenil y de minificción, el último una antología llamada “Aquí hay dragones”. Le encanta el café aunque le hace daño, no le agradan las matemáticas y no le gustaría vivir en Guatemala.
¿Su primer recuerdo?
La guerra, 1979.
¿Puede definirse en una sola palabra?
Creador.
¿Cuál es el mejor platillo que prepara?
Tostadas a la francesa.
¿Cuál es el mejor invento?
Los libros.
Una serie de televisión que recomendaría ver.
El diario de la medianoche, está en Netflix.
¿Dónde no le gustaría vivir?
En Guatemala.
¿Dinero o amor?
Amor, siempre.
¿Qué materia no le gustaba en secundaria?
Matemáticas.
Un objeto que salvaría de un incendio.
La historia interminable del autor Michael Ende.
¿Cuántos pares de zapatos tiene?
Cuatro.
¿El mejor consejo que le dio alguno de sus padres?
No imités a nadie.
¿Qué lo deja sin dormir?
Las tareas de mi hija.
Un momento vergonzoso.
Todas las veces que me tocó exponer en secundaria.
¿Cuántas tazas de café toma al día?
Tres, luego viene la acidez horrible (ríe).
Si pudiera ir al último concierto de su vida, ¿cuál sería?
Pink floyd.
Si le pidieran que cantara una canción, ¿cuál sería?
Odessa de los Bee Gees.
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