Con su obra “El pez rojo que nada en el pecho” , la poeta nicaragüense Gioconda Belli, se alzó con el premio «Jaime Gil de Biedma» en su XXX edición convocado por la Diputación de Segovia, España y dotado con 10.000 euros.
El jurado calificador destacó la “musicalidad, intimismo y fuerza desgarradora de la obra”, dio a conocer el coordinador del premio, Gonzalo Santoja.
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Asimismo eligieron dos accésit con la misma categoría pero dotados de 3.000 euros cada uno. Las obras “El fondo del cubo», del zamorano Daniel Refoyo, y “Versos perdidos en un desván” del madrileño Jesús Aguilar, resultaron las elegidas para el galardón.
Al conocer la noticia la poeta reaccionó en su Twiter:
Recién me entero que he ganado el XXXPremio de Poesía Jaime Gil de Biedma, un premio en honor de un poeta de la generación del 50 que admiro mucho. Mi libro ganador se llama: “El Pez Rojo que nada en el pecho” Sólo tres mujeres en 30 años lo han ganado. La noticia alegró mi día.
— Gioconda Belli (@GiocondaBelliP) October 7, 2020
“Un mito y una leyenda”
Santoja, asimismo destacó a Belli como “un mito y una leyenda” en Latinoamérica con obra traducida a varios idiomas.
Belli es conocida por obras celebradas como “El país de las mujeres” (VI Premio de Novela La otra orilla 2010), “Las fiebres de la memoria”, “La mujer habitada”, entre otras.
Sobre su poemario “El pez rojo que nada en el pecho”, Santoja, también destacó su enfoque “profundamente feminista”; de estar bien escrito y estar marcado por un sentimiento de “desgarramiento”.
Actualmente es disidente del FLSN y critica férrea de las políticas autoritarias del régimen Ortega-Murillo.
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La cuarta mujer en ganar el premio
Este año el Premio Jaime Gil de Biedma recepcionó 1.750 obras originales y Belli viene a convertirse en la cuarta mujer en ganarlo.
Antes lo recibieron Concha García, en 1994; Esperanza Ortega Martínez, 1995; y Clara Janés Nadal en 2002. Las obras premiadas tradicionalmente han sido publicadas por la editorial española Visor.
Este premio fue convocado la primera vez en 1991 en homenaje al escritor español Jaime Gil de Biedma, surgido en la generación del 50.
“Celebremos todos a una escritora leída”
“¡Bravísimo Gioconda!!!”, con esta expresión de admiración se expresó la escritora Rosa Beltrán, miembro de número de la Academia Mexicana de la Lengua, al conocer la noticia y felicitar a la poeta.
“Enhorabuena, Gioconda”, escribió por su lado el escritor español Benjamín Prado. También hicieron eco de la noticia las escritoras Carmen Boullosa de México y Silvia Elena Regalado, de El Salvador.
Un nuevo galardón literario para @GiocondaBelliP, quien ha ganado en España el Premio de Poesía Jaime Gil de Biedma. Celebremos todos a una escritora leída en todas partes, que pone en alto a Nicaragua. (Foto: La Nación) pic.twitter.com/4NtyvliFTq
— Sergio Ramírez (@sergioramirezm) October 8, 2020
“Celebremos todos a una escritora leída en todas partes, que pone en alto a Nicaragua”, invitó el escritor Sergio Ramírez desde su Twitter.
Desde Cali, Colombia, uno de sus lectores, Macos Galindo Muñoz dejó su comentario: “Merecido el premio para Gioconda. Una poesía fresca para estos tiempos tan convulsionados para los que disfrutamos el arte poético”.
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Las asesinadas
(Poema publicado el 24 de marzo del 2018, Cultura, La Prensa)
El pequeño pie de la mujer
sobresale bajo la sábana
bonito el pie, delicado.
De seguro le gustaría andar con las uñas pintadas
calzar altos zapatos elegantes.
El otro pie, todavía conserva
la sandalia del diario, de trabajo
esa incluso tiene una pequeña plataforma.
No es difícil imaginarla contenta y dicharachera
vendiendo naranjas o verduras en el mercado
—¿qué va a querer, doñita, le doy buen precio—
Hablando con la vecina del tramo
mientras se sopla con el trapo
porque hace calor.
Es de las que llegan a la casa y sientan al hijo a hacer las tareas
—estudiá muchacho, si no nunca vas a ser nadie—
y lava y plancha
y ya cuando el hijo duerme
mientras ve las noticias en el pequeño televisor
frente a la cama,
saca la lima, la acetona, se quita la pintura vieja de las uñas
y se las pinta con cuidado en lo que pasan los anuncios.
Al día siguiente.
el esposo, el amado o el descartado
llegará con los celos, la pendencia, el orgullo.
Será el grito, el manotazo.
La matará hundiéndole un cuchillo en el pecho.
Todavía incrédula.
Ella caerá al suelo de espaldas.
En la foto del periódico
nosotros veremos el pie delicado
asomar bajo la sábana que tapa su cadáver.
Veremos el otro pie todavía con la sandalia puesta.
Pies tristes. Ya sin dueña que les pinte las uñas.
Pies tristes. A diario.
Contando la misma historia.