Nonito Donaire a sus 38 años está en la recta final de su carrera. Ya no tiene nada que demostrar en el boxeo cuando sus logros lo encaminan para el Salón de la Fama con sus cuatro títulos mundiales en diferentes categorías (112, 118,122 y 126). No obstante, en su epílogo se está dedicando a cumplir las tareas pendientes y deseos momentáneos. Quiere volver a ser campeón mundial de las 118 libras, primero lo intentó ante Naoya Inoue y aunque perdió mostró las debilidades de un peleador que parecía perfecto, ahora pretende arrebatarle el cetro de las 118 libras del CMB a Nordine Oubaali y, después de esa pelea, enfrentar a Chocolatito para tener el título que siempre quiso y no pudo obtener: el de las 115 libras.
“Nunca me dieron la oportunidad de pelear en las 115 libras por un título por eso tuve que subir a las 118 directamente”, señaló a Dan Rafael en Boxing Scene. “Cuando estaba en la última pelea con Inoue durante el pesaje estaba en 116 libras y tuve que beber un poco de agua para subir y pesar 117.5”.
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Además continúo diciendo: “Es algo que puedo hacer y algo que quiero hacer. Después de eso, puedo decir que soy un campeón de cinco divisiones y luego subir a 130. Mi esposa (y gerente Rachel Donaire) me está mirando como que soy loco en este momento. Ella me dice que no me vaya a las 130”. Cuando Dan Rafael le preguntó por algún oponente en específico señaló al nicaragüense.
“Es una decisión fácil. Iría por Chocolatito González porque es un campeón mundial de cuatro divisiones y futuro Salón de la Fama. Creo que sería una gran pelea con Román. Aunque hay muchos muchachos que son increíbles. Los he visto pelear. Miro esas peleas y las disfruto. Los pesos pequeños son luchadores increíbles. Todo eso puede suceder, pero en este momento el foco principal es Oubaali”.