El excampeón mundial nicaragüense Juan Palacios se mudó en 2016 a México. Vive con su pareja y le agradece a Dios por sus dos hijos: Juan David y Juan Daniel. El otrora monarca de las 105 libras arribó a los 40 años. Aún no ha dejado de entrenar, aunque su trabajo principal es en la carpintería. “Si me contratan para hacer alguna pelea la hago”, indica. Palacios peleó por última vez en febrero de este año contra Alexis Zazueta, cayendo noqueado en el primer asalto. “Mi carrera terminó, pero le saco provecho a mi faceta de excampeón y así ganar algo más de dinero”, confiesa el peleador.
Realmente Palacios se retiró del alto nivel del pugilismo en 2011, cuando perdió el título en la báscula contra Armando Torres, a pesar que lo terminó noqueando en nueve asaltos. A partir de ahí hizo nueve peleas en un trayecto de nueve años y empató en dos de ellas. “Soy consciente de eso. Actualmente pienso poner un taller de costura con mi esposa. Pienso que podría entrenar a mis hijos si más adelante deciden hacerse boxeador”, señala.
Te puede interesar: ¡Everth Cabrera al desnudo! Cuenta las razones por las cuales cayó en las drogas y el alcohol
Palacios extraña el boxeo, pero no los sacrificios que hacía para prepararse. “Todos los días me levantaba a las 4:00 de la mañana a correr. Siempre me acordaba de la frase de Alí cuando decía que se preparaba en la oscuridad de la mañana para que en los reflectores del escenario le levantaran las manos”, relata el exmonarca, haciendo alusión a que eso era su fuente de inspiración.
Las peleas hipotéticas
Aunque el Exterminador admite que no ha estado muy pendiente de la actualidad del boxeo nicaragüense, recuerda a algunos campeones como Félix “el Gemelo” Alvarado. “Respeto mucho a Félix porque fue parte del equipo cuando me coroné porque mi apoderado (Mario García) lo escogió para ser sparring, sabíamos que era aguerrido y fuerte. Nos dábamos duro, yo tenía más experiencia y trayectoria. Félix aprendió mucho de los sparrings conmigo. Una pelea contra él sería muy buena para los fanáticos. Sería una pelea de guerreros porque aprendí que si no te metías a fondo no llegarías a ser campeón. El combate sería muy cerrado y ambos iríamos al frente, pero la mano me la levantaban a mí”, explicó Palacios.
Si algo muestra Palacios es que no se esconde. Le pregunto sobre un combate con Rosendo Álvarez y dispara. “Hice guanteo con él cuando empezaba mi carrera en 1999. Pertenecí a Boxing Star Promotion, que era su promotora, y me llevaban a Panamá para los sparrings. En una ocasión recuerdo que Rosendo se preparaba para el Beibis Mendoza y le metí un gancho y le doblé las piernas. Rosendo estaba perdiendo peso. Sin embargo, una cosa son los entrenamientos y otra es la pelea en sí. Rosendo fue mi maestro. Aprendí mucho de él”, asegura el Exterminador, además agrega: “La pelea estaría entre la fuerza del Búfalo y la inteligencia de Palacios. El error de Rosendo con la técnica panameña es que iba hacia al frente atropellando y el Finito le ganó con astucia, inteligencia”.
Y la última prueba de fuego de Palacios fue contra Román González. “Hicimos muchos sparrings juntos, fuimos campeones de las 105 libras simultáneamente. En una pelea contra él uno de los dos quedaría sin título. Siempre se rumoró que pelearíamos. Yo tenía la estrategia para vencerlo en esa categoría. Era similar a Argüello, contra el Púas iba perdiendo y el Ñato Marcel lo venció. A Chocolate le iba a pelear tipo Marcel con su combinación de rectas. En ese peso sí tenía posibilidades. Román sufría mucho para marcar el peso. Con todo respeto que merece: está como número dos de la historia del país, solo detrás de Argüello”, culminó el exmonarca.