Un día después de la pifia de Joel Fuentes, su semblante era totalmente diferente. Logró transmitirle otros aires a su equipo, cambiar el casete y levantar los ánimos, algo que parecía imposible. “Tenemos que defender nuestra casa, aquí no podemos perder”, fue parte del mensaje del estratega boricua que caló en sus jugadores. “Me gustó mucho la actitud de los muchachos, reaccionamos mejor y encontramos batear cuando era oportuno”, explicó el timonel.
Además, agregó: “Estamos entrando en ritmo y su picheo está cansado, ya se le bateó a Willy Paredes. Sobre lo del juego anterior, todos cometemos errores, me la comí, fallé. Cuando volví le dije a Lenín que me había equivocado. Todo fue muy rápido. Mañana vamos a salir a buscar esa gran victoria. Tengo fe, si ganamos en Chinandega el martes nos coronamos en Rivas. Así que tenemos que salir a ganar. Me cuesta dormir un poco, pero lo más importante es confiar en los muchachos”.
También Fuentes destacó la importancia de haber sentado a Denis Phipps por el slump en el cual estaba, asimismo le dieron más defensiva al equipo con Fausto Suárez. “Phipps respondió, fue clave su batazo. Cumplió en su momento”, señaló.
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Por otro lado, Cheslor Cuthbert, quien conectó un imparable e impulsó una carrera se refirió a la actuación del conjunto: “Fue un trabajo en equipo. Los lanzadores y la defensiva respondieron. Siempre trato de hacer buenas jugadas. En este momento no importa el promedio de bateo, lo importante es dar el batazo en el momento oportuno, cuando el equipo lo necesita. Ojalá que la fanaticada nos siga apoyando en los tres partidos que faltan”, concluyó Cuthbert.