La noche de este martes falleció el cronista deportivo Xavier Araquistain a los 64 años. Su cuerpo no pudo soportar más las embestidas de las enfermedades. Poco a poco pasó de ser una persona con un físico fuerte a alguien debilitado. Todo empezó con unas piedras en los riñones hace cinco años, más tarde, mientras se preparaba para comentar un partido le dio un derrame cerebral, en 2017 se complicó aún más cuando se fracturó la columna evitando que se inundara su casa. Y en el último mes estuvo en el Hospital Militar por problemas renales, hepáticos y coronarios, doblegándose ante la muerte, no sin antes haber reunido para despedir a toda su familia.
En una entrevista para LA PRENSA, Araquistain se refirió a la muerte: “Estoy preocupado porque no sé si voy a seguir (vivo)”. Su aliento por seguir luchando era evidente, tenía sentido del humor. “A mí me dan ganas de morirme este año: se han muerto los beisbolistas Bob Gibson, Whitey Ford, Joe Morgan y ahora hasta Diego Armando Maradona… Esos hijueputas en algún lado del cielo están jugando, y yo tengo que verlos para narrarlo”, señaló, el amplio conocedor deportivo, quien cumplió uno de sus sueños al entrar al Salón de la Fama del Deporte Nicaragüense en este 2021 junto a Oswaldo Mairena, Bayardo Dávila y el también redactor deportivo fallecido Juan Navarro.
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Según relató Carlos Reyes, durante la transmisión de Canal 13, Araquistain le recomendó a su hijo Gianpaolo a no perderse el sexto partido de la final y se encontraba muy lúcido y consciente, dándole consejos sobre cómo encarar el encuentro entre los Tigres de Chinandega y los Gigantes de Rivas. Por otro lado, en la página Nicabeis en la cual colabora uno de sus hijos publicaron lo siguiente: “El “Chele” Araquistain ya duerme profundamente, descansando de tantos males que lo aquejaron en sus últimos meses de vida, y nosotros como familia tenemos la firme esperanza en Jehová Dios, que nos dará el consuelo y fortalezas necesarias para soportar esta incalculable pérdida, y en futuro no muy lejano, si es la voluntad de Dios, poder volver a verlo en un lugar donde no existirá la muerte, ni tristezas, ni llanto, ni dolor, ese lugar donde lo malo habrá desaparecido”.
Actualmente, el Chele trabajaba en el área de prensa del Comité Olímpico Nicaragüense y había sido confirmado por el Canal 10 a ser el cronista principal de la transmisión de los Juegos Olímpicos de Tokio. Su vela será este miércoles 20 de enero en la Colonia Centroamérica frente a la Iglesia de Fátima a partir de las 9:00 a.m.
