El preso político recapturado, Carlos Alberto Bonilla López, fue acusado de tráfico de drogas un día después que fue emitida su orden de libertad por cumplimiento de la sentencia de un año de cárcel.
La información sobre la nueva acusación emitida por el Juzgado Quinto Distrito de lo Penal de Audiencia Circunscripción Managua, fue confirmada por la abogada de Bonilla, Yonarqui Martínez.
La presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Vilma Núñez, manifestó que el caso de Bonilla revela la forma en que el régimen de Daniel Ortega está aplicando la cadena perpetua a los presos políticos, incluso desde antes de haberla aprobado.
“De esta forma tan perversa y además cobarde, están aplicando desde hace tiempo la prisión perpetua. Es imperdonable que a Carlos Bonilla, estando su orden de libertad, ahora lo acusan de tráfico de droga, esto es inaceptable, es imperdonable…”, dijo Núñez
La defensora de derechos humanos recordó el caso del preso político Marvin Vargas, a quien han mantenido en prisión por razones políticas por más de 10 años, imputándole diferentes delitos cada vez que se cumple la sentencia anterior.
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Bonilla participó en las protestas civiles contra el régimen de Daniel Ortega en 2018. Estuvo preso por primera vez 11 meses, con una condena de 90 años, tras un proceso con sesgo político por el control que ejerce el régimen orteguista en el sistema judicial.
Fue excarcelado el 11 de junio de 2019, bajo la cuestionada Ley de Amnistía en 2019, pero la Policía Orteguista (PO) nunca lo dejó de asediar ni perseguir.
Preso político recapturado
Se fue al exilio el 8 de septiembre del 2019 debido al asedio y amenazas constantes. Regresó el 15 de enero del 2020 para celebrar el cumpleaños de su hija, pero el 18 de enero, tres días después de su regreso, fue capturado, acusado y condenado a 12 meses por supuesta tenencia ilegal de arma de fuego, un modus operandi practicado por el régimen con los opositores que regresaban del exilio.