“Tan solo es el segundo partido” podrían decir los optimistas en el caso de Cheslor Cuthbert al irse nuevamente en blanco en el Spring Training con los Rojos de Cincinnati. Sin embargo, cuando aún no significás nada para una organización, sos el chico raro, un invitado más y tu futuro está en juego, hasta la mínima pisada cuenta. Ya lo decía Dennis Martínez la semana pasada: “Los equipos en Grandes Ligas se fijan también en las pequeñas cosas”. Este lunes inició como titular contra los Atléticos de Oakland en la primera base en el encuentro a siete entradas. Cuthbert tuvo dos turnos y su promedio de bateo sigue sin despegar con un doloroso .000.
En su primer turno se enfrentó al muchacho Grant Holmes, de 24 años, quien aún no se establece en las Grandes Ligas. Cuthbert fue domado para un elevado a la primera base. El costeño fue el último out de la segunda entrada y dejó a un corredor en la segunda, dejando una mala impresión con corredores en posición anotadora. Posteriormente, en el quinto inning volvió a conectar un elevado sin gente en base al jardín derecho. En esa última ocasión en el cajón de bateo fue dominado por Reymin Guduan, otro lanzador sin números respetables en Grandes Ligas y que busca un espacio en el roster de los Atléticos. Luego el pelotero pinolero fue sustituido por el dominicano Narciso Crook.
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Por su parte, Alex Blandino tampoco tuvo un día para sonreír. Jugó como titular en la tercera base y tercer bate, posteriormente pasó al campo corto, reflejando su flexibilidad y utilidad para los Rojos con el guante, pero tuvo apagado su bateo. Blandino recibió base por bolas en el primer episodio y se fue al robo, pero el receptor Aramis García lo atrapó en el lance a la intermedia. En la cuarta entrada ligó una rola al pícher y se ponchó en el sexto.