El académico y exembajador de Nicaragua en Estados Unidos, Arturo Cruz Sequeira, anunció este martes su intención de ser precandidato a la Presidencial de Nicaragua, sin embargo, quiso dejar claro que no quiere ser “zancudo”, en alusión a los partidos políticos que participan en las elecciones para hacerle el juego a Daniel Ortega y ganarse una diputación u otro cargo público.
“Yo no voy a ser zancudo elegante, yo no voy a ser zancudo científico”, dijo Cruz, quien explicó que el término de “zancudo científico” surge de un análisis académico sobre la revolución sandinista, que la veían como “un somocismo científico’.
Cruz hizo el anuncio de su precandidatura este martes, en la presentación de su nuevo libro Nicaragua – La impronta de la colonia – Tres siglos de historia, que es un análisis político y académico de la época de la colonización española, monarquía, esclavismo, castas sociales criollas, las luchas por el poder, rebeliones, caudillismo y continuismo.
El académico confirmó que está dispuesto a medirse con otros precandidatos presidenciales opositores, para seleccionar al candidato único que enfrente a Daniel Ortega en las elecciones generales del 7 de noviembre de este año, pero dijo que “debe haber un proceso de discusión para hacerlo”.
Entre los asistentes al evento de Cruz, sobresalieron Cristiana Chamorro y Juan Sebastián Chamorro, quienes también son precandidatos presidenciales e igualmente están comprometidos a someterse a proceso de selección del candidato único de la oposición.
Sobre firmar el compromiso para someterse a ese proceso de selección como lo han hecho otros aspirantes presidenciales opositores, Cruz dijo que apenas acaba de proclamar su precandidatura, pero verá eso más adelante.
El exdiplomático hizo ver que para él es importante proyectar un discurso franco de la realidad política del país, y por eso no puede ignorar el peso que tiene la base electoral del partido gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), encabezado por Daniel Ortega y su esposa, Rosario Murillo.
“Si nosotros, de alguna manera, estos precandidatos llegamos a definir al candidato que queremos, y ese candidato que queremos llega a la presidencia, también tenemos que reconocer algo: vamos a tener que lidiar con el sandinismo. Yo sé que esto no es popular, pero el sandinismo representa en condiciones electorales básicas el 35 por ciento”, dijo Cruz.
A la vez, Cruz respondió a quienes lo han cuestionado por proponer una salida en la que el orteguismo siga vivo políticamente. Particularmente Félix Maradiaga, el domingo pasado en el lanzamiento de su precandidatura presidencial, se comprometió a no hacer “acuerdos a espaldas del pueblo” ni a “permitir aterrizajes suaves”.
“Cuando un amigo nuestro, que tanto queremos, dice que no va a permitir el aterrizaje suave, yo no sé qué quiere decir (al decir) que no va a permitir el aterrizaje suave. Es como si vamos todos en un avión y que creamos que si nos caemos, solo el piloto se muere y nosotros quedamos vivos”, manifestó Cruz.
Otros de los asistentes al evento de presentación del nuevo libro de Cruz, que al final se convirtió en su lanzamiento de precandidatura, fueron los jóvenes universitarios Lésther Alemán y Valeska Valle, ambos líderes de grupos estudiantiles. También sobresalió la presidenta del partido Ciudadanos por la Libertad (CxL), Kitty Monterrey.
Asesor de CxL
El académico confirmó ser asesor del partido CxL y dijo que le tiene “respeto” y es un vehículo electoral con el que se siente “cómodo”.
Cruz ya había dicho en ocasiones anteriores que el partido opositor CxL es un buen vehículo para que la oposición participe en las próximas elecciones, en vez de estar creando nuevos partido u organizaciones.
El exembajador fue presentado como uno de los tres asesores de CxL, en noviembre de 2019. Los otros son Humberto Belli y Bosco Matamoros.
Cruz fue embajador de Nicaragua ante Estados Unidos cuando Daniel Ortega recién había regresado al poder en 2007. Aseguró que ese cargo lo aceptó porque fue una solicitud del expresidente de Estados Unidos, Jimmy Carter, quien participó con su organismo de observación electoral en las elecciones de 2006; pero también recordó que se separó de ese puesto diplomático tras el cuestionado proceso de elecciones municipales de 2008.
“Yo fue embajador de Nicaragua hace doce años y en gran medida eso tuvo mucho que ver con la solicitud del expresidente Carter, que estaba presente en Nicaragua y básicamente miraba la situación muy incierta. Había un gran temor de que regresaramos a la década de los ochenta, a la década de las confiscaciones, a la década de conflicto de los Estados Unidos, en un momento que había que defender dos cosas, los empleos de Cafta (Trata de Libre Comercio con Estados Unidos) y la famosa Cuenta del Milenio y tratar de contener esos excesos. Y ahí es adonde viene la propuesta, que fue iniciada por el presidente Carter, de que alguien como yo asumiera ese cargo, y yo lo asumí en buena conciencia pensando en el interés nacional, y lo hice por dos años”, relató Cruz, para explicar porqué fue embajador del gobierno de Ortega.
Cruz Sequeira, de 67 años, es hijo de Arturo Cruz Porras, quien formó parte de la Junta de Gobierno de Reconstrucción Nacional (1980-81) del gobierno sandinista y luego disidente. Es economista y académico, con 25 años de ser catedrático en el Instituto Centroamericano de Administración de Empresas (Incae).
Consultado por LA PRENSA, reconoció que frente al régimen de Daniel Ortega “es difícil la transición en estas circunstancias”, pero “es un régimen sin legitimidad” y lo mínimo que podría ofrecer son elecciones competitivas.
“Si se quieren ayudar ellos mismos (el régimen) la única salida es la elección competitiva. El problema del gobierno que tenemos no es problema de capacidad de votantes, es un problema de que no hay legitimidad… y es percibido como indeseable. Empecemos ha tener confianza entre nosotros y tenernos cierta tolerancia y caridad cristiana. Los nicaragüenses quieren normalidad… lo tenemos que hacer con algo que se nos ha escapado de las manos, que es con procedimientos, normas. Tengo la confianza que lo vamos a hacer”, indicó Cruz.
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Durante la presentación de su libro, Cruz agregó que “hasta los Estados Unidos superó un caudillo por ahora (en alusión a Donald Trump” y cuestionó al presidente Nayib Bukele por el irrespeto a la formalidad democrática que ha venido demostrando.
Agregó que se debe invertir en la educación “porque desde chiquitos se (nos) va enseñando a amar la democracia”.
Las elecciones generales de Nicaragua son el próximo domingo 7 de noviembre, para elegir presidente, vicepresidente, diputados nacionales y ante el Parlamento Centroamericano (Parlacen).