Ya se ha dicho y analizado los números generales de CompuBox, que Chocolatito tiró 1,317 golpes, mientras el Gallo 1,212, que el nicaragüense acertó 391 para llegar a un 89 por ciento, mientras el mexicano aterrizó 314 para sumar 25.9 por ciento de efectividad. No obstante, ¿qué pasaría si puntuamos la pelea round por round utilizando solamente los números de la computadora? ¿Quién ganaría? ¿Sería una pelea cerrada? ¿A Chocolatito le tocaría el mismo desenlace?
En el primer asalto Chocolatito se congeló. Empezó lento. Estrada tuvo la iniciativa y tiró más golpes. Sumó 80 lanzados, pero la mayoría quedaron en los guantes del nicaragüense. Solamente ocho llegaron a la humanidad del nacido en La Esperanza, quien lanzó 43 y aterrizó la misma cantidad, sin embargo como no existen los asaltos empate en la actualidad, puntuaremos 10-9 a Estrada por haber lanzado más y tener la iniciativa. La dinámica cambió en el segundo round. Chocolatito reaccionó y soltó muchos golpes, no solo aumentó su efectividad: golpeó con 27 de 86 lanzados, entretanto el azteca atacó con 79, pero 16 llegaron a su destino. Con la pelea empatada Chocolatito superó el tercero con 29-18 en golpes conectados, llegando por primera vez a la línea de los 100 golpes (114).
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Para los números de CompuBox, el cuarto asalto fue uno de los más parejos. Chocolatito lanzó 120 golpes y conectó 34, mientras Estrada 100 y aterrizó 33. El quinto asalto se parece al primero: ambos peleadores se dieron 25 golpes, pero Estrada lanzó 107 y Román 93, por haber tirado más y tener iniciativa se colocaría la tarjeta a favor del mexicano. Durante el sexto, González ligó 41 impactos sobre los 34 del oponente, se sostuvo por uno en el séptimo (48-47), por cuatro en el octavo (25-21), cinco en el noveno (27-22), 23 arriba en el décimo (36-13), sobrevivió uno encima en el undécimo (37-36) y lo aplastó (55-40) en el último, cuando hizo tambalear a González.
La tarjeta cruda, fría, hecha con base a los números de CompuBox decretaría ganador a Román con una tarjeta 117-111, la misma de Carlos Sucre, juez suspendido, pero esta vez a favor del nicaragüense y no del mexicano. Y si sumáramos asalto por asalto los golpes de poder, también saldría ganador el nicaragüense: 115-113, con siete asaltos a su favor y cinco en contra.