El Estado de derecho anda de capa caída en América Latina y el Caribe. El organismo no gubernamental World Justice Project, WJP, (en español Proyecto de Justicia Mundial), informa que en 22 de 32 países latinoamericanos y del Caribe examinados, el Estado de derecho ha retrocedido en el último año.
Es una situación grave, considerando que como dice WJP en su portal en línea: “Cuando el Estado de derecho es débil, a las personas se les niegan los derechos básicos a la seguridad, la libertad y la justicia”.
La WJP fue creada en el año 2006 por iniciativa de 21 países de la Asociación Norteamericana de Abogados y en 2009 se transformó en una organización independiente sin fines de lucro, con proyección internacional.
La misión de la WJP —declara en su portal electrónico— es promover “una mayor concienciación pública sobre la importancia fundacional del imperio de la ley, estimular reformas gubernativas y desarrollar programas prácticos”. Como es el proyecto de investigar la situación del Estado de derecho en el mundo.
La WJP entiende como imperio de la ley, la primacía de la norma jurídica sobre cualquier otro principio gubernamental, “especialmente contra la tiranía y la arbitrariedad del poder político”. Por supuesto que la primacía de la norma jurídica se refiere a la ley dictada de conformidad con los principios universales y fundamentales de la justicia. Esto significa que aquellas leyes que son dictadas como instrumentos de represión jurídica para sostener a un régimen autoritario y castigar a las personas que reclaman sus derechos, no son legítimas y no pueden ser fundamento del Estado de derecho.
El Índice Anual del Estado de Derecho de WJP clasifica a 140 países del mundo a base de considerar la seguridad pública, la transparencia gubernamental y el respeto a los derechos humanos, entre otros factores clave. E informa que en El Salvador, Nicaragua y Venezuela es donde más se ha deteriorado este año el Estado de derecho, en comparación con 2021.
Según la investigadora Natalia Rodríguez, quien participó en la presentación del informe de WJP correspondiente a este año, son tres los factores principales que han contribuido al mayor deterioro del Estado de derecho en los países mencionados. Uno es que se han reducido los límites al poder gubernamental, el segundo es la degradación del poder judicial por su sometimiento al Ejecutivo, y el tercero es la falta de protección a los derechos humanos.
WJP informó que en Nicaragua resulta más difícil hacer la investigación, por “el incremento a las barreras de las libertades”. En este país no se pudo hacer entrevistas a hogares para preguntar directamente a las personas, de manera que solo se contó con cuestionarios presentados a expertos.
Esto confirma la clasificación de Nicaragua como uno de los países donde más se ha deteriorado el Estado de derecho, ya que precisamente por falta de seguridad jurídica no se pudo hacer las entrevistas de hogares que se hacen en los demás países.
Pero el informe de WJP sobre el Estado de derecho en el mundo no destaca solo a los países donde su situación es peor, sino también a aquellos donde es mejor. Dinamarca figura a la cabeza, seguida de Noruega, Finlandia, Suecia y Holanda, con el cual el régimen de Nicaragua rompió relaciones diplomáticas recientemente.