Geraldina González C.
Para que tu boda sea un acontecimiento perfecto es fundamental que, con anterioridad, planifiques con tiempo cada una de las actividades que realizarás, así como el costo que eso implicará.
Cuando no se cuenta con el apoyo de una especialista en organización de eventos o un planificador de bodas, lo más recomendable es empezar a planificar por lo menos un año, aconseja Matilde Vargas, planificadora de bodas y propietaria de Easy Events.
En el caso de contar con una planificadora, la organización puede realizarse seis meses antes, ya que esta persona se encargará de cada detalle, desde los más sencillos hasta los que podrías considerar estresantes, para que tú estés relajada y disfrutes tu boda.
Con una planificadora o sin ella, para cerciorarte de que todo se ejecute a la perfección, lo ideal es elaborar un calendario con todas las actividades que realizarás para tu boda. Vargas sugiere organizar estas actividades por orden de prioridad y cumplir el calendario al pie de la letra.
Para tal fin, Vargas propone el siguiente orden:
*Primero: elaborar la lista de invitados, la cual también te ayudará a organizar el presupuesto y darte una idea del lugar donde pueden realizar la boda.
*Segundo: elegir el mejor lugar donde se realizará la boda para asegurarse de que esté disponible para la fecha planeada y, sobre todo, que sea un espacio ideal para la cantidad de invitados, tomando en cuenta la decoración y servicios que piensan incluirse.
En caso que la boda se realice en un hotel, el mismo día que se reserva el salón se sugiere que se elija el menú de la recepción. Si la boda se realizará en una casa o en otro lugar que no ofrezca servicio de catering, ese mismo día debe buscarse.
Si se trata de una boda eclesiástica, Vargas señala que el mismo día que se escoja el salón se verifique que la iglesia también esté disponible en la fecha y hora planeada.
*Una vez que se tenga asegurada la iglesia y el lugar, se procede al tercer paso: imprimir las invitaciones, pues mientras más pronto se distribuyan, mejor.
*El cuarto paso es buscar y elegir el vestido de novia y, acto seguido, el pastel.
“Muchas veces a la novia se le facilita elegir el resto de la decoración basándose en los colores y detalles que tendrá el pastel”, explica Vargas.
*Por tal razón, una vez elegido el pastel, el quinto paso es elegir la decoración del salón. Es decir, el concepto o tema de la boda, todo lo que respecta a mantelería, floristería y demás detalles.
La selección de la música que ambientará la recepción dependerá del gusto de los invitados, afirma Vargas, por eso “pueden optar por música en vivo en caso que sean personas mayores y les guste bailar, o bien un DJ si se trata de jóvenes”.
Finalmente, cerca del evento se recomienda elaborar un programa del antes, durante y después de la boda, y asegurarse de que el día de la boda algún familiar o persona responsable y de confianza vele porque todo lo planeado esté en perfecto orden.
Presupuesto
Para elaborar el presupuesto de la boda se deben tomar en cuenta todos los gastos necesarios, pues por muy pequeños que parezcan pueden alterar el presupuesto, explica Elaine Miranda, administradora financiera.
Lo primero que se debe tener claro, según Miranda, es cuánto dinero se tiene disponible para la boda, pues ya sabiendo la cantidad exacta, podrán empezar a planear el tipo y cantidad de gastos que tendrán.
“Es imprescindible que la pareja se ponga de acuerdo en cuáles son las cosas que más valoran (la misa, la fiesta, la comida, el lugar) y, con base en estas prioridades, decidir en qué van a gastar y cuánto”, expone Miranda.
La especialista afirma que lo más recomendable es financiar este tipo de eventos con recursos propios, aún cuando no exista abundancia de presupuesto, pues empezar la vida en pareja con una deuda no es lo más recomendable.
Sin embargo, en caso de que la pareja desee ampliar el presupuesto disponible, puede optar por un préstamo bancario personal.
“Cada banco tiene diferentes requisitos, pero en general, si tenés un empleo o un bien con el cual respaldar tu préstamo, no es difícil conseguirlo. Te pedirán información personal, así como llenar un formulario para analizar tus ingresos y así saber cuánto dinero te pueden prestar”, explica Miranda.
Si no se tiene un buen control de los gastos necesarios, al final se podrían exceder en los gastos del presupuesto elaborado, por eso Miranda recomienda siempre dejar un excedente para los gastos imprevistos.
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