DRA. MARÍA LUZ ANDRÉ
MÉDICO–NUTRICIONISTA CLÍNICO
Los alimentos no solo contienen vitaminas, minerales, grasas y calorías, también contienen una carga química. Los alimentos como la carne, los lácteos, la cafeína y el alcohol son más ácidos. Los alimentos alcalinos neutralizan el ácido de nuestro cuerpo. Tanto los compuestos ácidos como los alcalinos se producen simultáneamente en nuestro organismo. Es mejor que nuestro cuerpo tenga un nivel más alto en alcalinidad que en acidez.
La dieta alcalina es aquella en la que se suprimen los alimentos ácidos y se promueve una alimentación a base de frutas y vegetales.
Los beneficios de la dieta alcalina serían: Mejora el sistema muscular y óseo del organismo. Mejora el sistema cardiovascular. Ayuda a mantener los niveles óptimos de calcio en sangre. Evita problemas inflamatorios. Previene las migrañas. Previene la artritis.
La dieta alcalina no es una dieta para perder peso. Se trata de una dieta para eliminar todo aquello que perjudica a nuestro organismo, siendo el objetivo conseguir un nivel de 7.4 de pH para que el organismo no tenga que utilizar las reservas de calcio y magnesio que residen en los huesos y músculos. Lo ideal para mantener una dieta alcalina equilibrada es consumir un 80 por ciento de alimentos alcalinos y un 20 por ciento de alimentos ácidos (carnes, quesos, alcohol, azúcar).