Unas horas de piedad
Daniel Calabrese
No me atropelles,
que yo era un niño.
No me aplastes,
que yo era ciego, puro,
y me gustaban los juegos simples
como bañarme en el mar, o sentir el pasto húmedo hundido bajo mis botas.
No me atropelles,
que yo era un niño
y la luz de mi pecho se quemó.
Creo que puedo meter un brazo
en el fantasma que me anima.
Creo que puedo retorcer
mi corazón con estas manos
y lavarte los vidrios,
besarte los ojos.
Escritura en un ladrillo
¿Qué hemos escrito que lo cambie todo?
Hemos puesto los navíos
a agitarse en el océano,
y eran las luces el agua,
el sol aquella piedra con metal.
En ese barco bebía un capitán
la espuma silenciosa de las horas
y, tal vez, llegaba tarde el sueño cada noche.
Hemos dicho que la dársena
escondía una sirena
entre los hierros carcomidos por la sal,
pensamos en el frío,
en la luna desgarrada por las grúas.
¿Creamos los fantasmas de humedad en la pared?
Es cierto, el cielo ha sido bestial
este año con los ciegos y ambulantes,
pero ¿qué hemos escrito que lo cambie todo?
Somos de carne
Los ángeles se rompen.
Hay una blanca neblina
que puede convertir en ángeles
a todas las personas
y oxidar un barco.
El amor es justo,
es más de lo que un hombre puede resistir.
Como el vientre
de hierro de las naves,
se corroe justo ahí,
para que tarde o temprano te hundas.
Técnica de autorretrato
Fui construido en 1962.
Me sacaron bruscamente del cielo.
No de un cielo que después
sobrevolaron las gaviotas carroñeras.
No de un cielo blanco donde se pudre
la luz amarilla de una lámpara.
No de un cielo para que se revuelvan los aviones.
Me sacaron y tengo que decir quién soy.
Fui construido en el sesenta y dos.
Las vueltas que dio el metal en cada reja.
Las que dio la sangre enterrada en este cuerpo.
Unos pocos se atrevieron a volver
al cielo más profundo (en esta época).
¿Has visto que la mayoría no se levanta
del cielo bajo, del que baña el horizonte?
Me sacarán bruscamente de la tierra.
De la tierra sobrevolada, revuelta.
Y tendré que volver a decir quién soy. Daniel Calabrese . Argentino. Ha publicado los libros publicados La faz errante, Futura Ceniza, Escritura en un ladrillo, Oxidario. Ha obtenido el Premios y distinciones Estatuilla Alfonsina Storni, otorgada a la mejor producción literaria del año por “La faz errante”, 1989 Segundo premio Fondo Nacional de las Artes, categoría obra inédita, por Oxidario, 2001.
A Pizarnik
Gabriel Chávez Casazola
1
En el principio fue la palabra
dicha y la escritura se hizo
La hizo
un náugrafo
exasperado
Un melogramático
buscandosiempre
desamar las palabras
Quitarles las sandalias
apenas esopara que puedan caminar
descalzas
6
Hace frío y no quieres escribir esta frase
Es que
La cosa comienza a resonar y
No hay de qué echar mano
Ninguna semilla podrá aplacar tu semoviente
Ira
Ni tostada ni fumada ni
Bajo destilación
Es mejor estar claros
Quisieras acostarte pero
En el caracol
Algo rechina y vibra
No tienes otro remedio que echarte sobre los pies una manta
De esas a cuadritos
Escribir no más esta frase
Y ponerte tu también a rechinar.
7
Para escalar
a lo indecible
como un albañil has de subir primero
peldaño tras peldaño
el balde de lo dicho
Y aunque nunca te acerques
a la cima
En el momento justo
has de vaciar
el balde
y es preciso además
renunciar a la escala.
Gabriel Chávez Casazola . Boliviano, 1972. es escritor, periodista y gestor cultural boliviano. Sus libros de poesía: Lugar Común y Escalera de Mano . En otros géneros ha publicado La apuesta de Odisea y otros ensayos y cuentos en revistas como Correveidile y Medusa de fuego.
Oleaje con espuma y esperanza
Los ecos corren tras la montaña,
ruedan estrellas cielo abajo.
La sábana húmeda del amanecer
sostiene los sueños de dos desconocidos
a punto de nacer:
furia de alacranes reprimidos;
ausencia de piel tibia y abrazos que no se abrazan.
En la frontal usurpación de almas
sólo la bandera de una mirada
podría establecer sus dominios:
el recuerdo de un oleaje con espuma y esperanza;
unos ojos que siempre se buscaron
y que jamás se encontraron.
¿Se puede memorizar al mar?
Un planeta llamado Paul Schaeffer
Un planeta llamado Paul Schaeffer,
llora en su laberinto recordando al sol,
abortado ya del aire,
como un asmático
en espera de la madrugada.
Y luego, la señal que no llega:
el agua sexual en su despeñadero, hacha en mano,
deforestando los montes deforestados del corazón,
Como en Nicaragua, o en Guatemala,
cuando los ríos desmadrados
arrastraron niños que la vida reclamaba
y desde una ribera precaria
sólo cadáveres de niños
podían verse flotar, lejos de la ternura, camino hacia la mar. Bernardo Reyes nació en Temuco, Chile, el 18 de septiembre de 1951. Ha publicado: Pájaros de contrasueño, Edición Privada, Temuco, Chile, 1991, Karmazul, para duendes y sirenas, Ed. Isla Negra (Puerto Rico) y Ed. Buho (República Dominicana), 1996, Carta para un hijo imaginario y otras desmemorias, Dolmen Ediciones, 1999. La primera edición aparece en marzo de 1999 Ensayo Retrato de Familia, Neruda (1904-1920), Editorial de la Universidad de Puerto Rico. Tiene varios premios importantes.
El primer canto de los ríos
Es el amor ése es el amor
Ay ése es el amor
Ay ése es el amor
que hemos llorado tanto
selargan los ríos que se aman partiendo
Cauce abajo arrojándose sobre las praderas
que lloraban mirándose Nosotros somos las
montañas que lloraron mirándose dicen los ríos
que las llamaban arrastrándolas
Borrascosos tras las largas praderas que los
vientos subían Quiénes nos subieron el dolor
de esas montañas se van diciendo las inmensas
praderas del cielo Somos todos los pastos de
este mundo les contestan largándose los ríos
que se aman
abiertos
tirados
rompiéndose.
Diálogo de Chile
Verás un mar de piedras
Verás margaritas en el mar
Verás un Dios de hambre
Verás el hambre
Verás figuras como flores
Verás un desierto
Verás el mar en el desierto
Verás tu odio
Verás un país de sed
Verás acantilados de agua
Verás nombres en fuga
Verás la sedVerás amores en fuga
Verás el poco amor
Verás flores como piedras
Verás sus ojos en fuga
Verás cumbres
Verás margaritas en las cumbres
Verás un día blanco
Verás que se va
Verás no ver
Y llorarás Raúl Zurita nació el día 10 en Enero el año 1950 .Algunos de sus libros publicados son Purgatorio (1979), Anteparaíso (1982), Canto a su amor desaparecido (1986), El amor de Chile (1987), La vida nueva (1994), Poemas militantes (2000), Sobre el amor y el sufrimiento (2000) e INRI (2003). Ha sido traducido al inglés, ruso, hindi, alemán e italiano, entre otros idiomas.
Génesis
Nora Hall
Yo moriré de vida y no de tiempo
… y en la crueldad del octavo dia hubo tarde
y hubo manana y el bruto libre vio el mundo y lo nombro
despues estuvo ella
y conocio el deseo y supo
que un dios conocio la ira
y los maldijo
-los condeno a morir-
Pero les dejo el saber y la culpa del deseo
Ejercicios espirituales
Hubiera querido
retirarse a una cueva
humillar su timidez
hasta que el miedo cediera de a poquito
resucitar triunfante pero hay olores que ensanchan la nariz
moras y guayabas robadas
con discrecion pulcras mantillas del angelus
almohadas ya lavadas de historia
flores ajándose en los entierros familiares
innecesaria tinta para exvotos
sangre que se va sola y al concentrarse detrás del perfecto aroma va apareciendo una ira indescifrable que impide toda resurreccion.
Nora Hall .Profesora de Castellano, Literatura y Latín. Desde 1986 coordina un taller literario en Rosario. Pertenece al Grupo de Poetas del Boulevard. Es miembro del grupo editor “Papeles de Boulevard”. Publicó los siguientes libros de poesía: Hasta pulverizarse los ojos, (Mención de Honor Premio Provincial “José Pedroni”); Todo mal, (Primer Premio Provincial “José Pedroni”) y Manual del agua.
Ver en la versión impresa las paginas: 8 ,4 ,10 ,2