Emiliano Chamorro Mendieta
En la familia se aprende a vivir y a crecer, asegura el sacerdote Óscar Chavarría, quien siempre llama a los responsables de la familia a crecer y educar en valores a sus hijos, al recordar que los tiempos actuales ponen en peligro los valores tradicionales de la familia.
“Sin familia: se pone en peligro la vida política de un país, porque empieza a notarse la ausencia de líderes capaces de darse en servicio al bien común”, afirma.
Sin familia, “se pone en peligro la economía del país porque se multiplican los problemas sociales: la corrupción, la falta de trabajo, la educación, la delincuencia, la pobreza… Se pone en peligro la convivencia y la misma paz social por la ausencia de valores que sólo se aprenden en el seno familiar”, reflexiona Chavarría.
La Iglesia católica ha proclamado el 2014 año de la Familia.
“Los mismos gobiernos y poderes públicos no le están dando la importancia que la familia se merece. Los problemas económicos se agudizan cada vez más y quienes los sufren más directamente son las familias”, expuso.
“Los sistemas educativos no afrontan con seriedad la importancia de la familia y los valores que en ella deben resaltarse ante los alumnos desde la más tierna edad”, comentó.
“En la familia se aprende a vivir y a creer. Estamos en Navidad y Año Nuevo. Todo lo que en estos días estamos celebrando y expresando ¿de quién o en dónde lo hemos aprendido? Sin dudarlo, y salvo algunas excepciones, de nuestros padres y en nuestras familias. La Sagrada Familia también nos trae una buena catequesis: la confianza, el amor y la fe en Dios, por parte de José y de María“, reflexiona el padre Chavarría.
El sacerdote valora que en la familia está la gran escuela para la enseñanza de los valores morales donde se forma con criterio propio y luz personal.
“Se suele decir que una cosa no se valora hasta que no se tiene. Que, nosotros en Nicaragua y en nuestros países, sepamos dar gracias a Dios por esa gran escuela, universidad, taller y semillero de valores (religiosos, sociales, culturales ) que son nuestras familias. Sólo así, lejos de ser “clones” de una sociedad interesada y caprichosa, seremos hombres y mujeres con raíces profundas, con criterios propios y con luz personal“, reflexiona el guía espiritual.
¿Es posible un futuro sin familia? Se pregunta el padre Chavarría, cura párroco de Villa Sandino, Chontales.
“Sin duda alguna que la crisis por la que estamos pasando extiende sus brazos a todos los sectores de la sociedad, no sólo en el sector económico, político, ético y religioso sino también familiar. Si algún grupo humano sufre las consecuencias de esta crisis, es la misma familia. Y muchos no caen en cuenta que quienes hablan contra la familia no saben lo que hacen, porque no saben lo que deshacen“, reflexiona el sacerdote diocesano.
El guía espiritual asegura que no existen familias sin inconvenientes, y recordó cómo María y Jesús pasaron por un mar de dificultades, pese a que estaban bendecidos por Dios.
“No existe familia sin inconvenientes. Hasta la de Nazaret, tocada y bendecida por Dios, tuvo que pasar por un mar de dificultades”, apunta el padre Óscar.
En ese sentido dijo “que no hay gran empresa, aunque sea inspirada de Dios, que no tenga sus tropiezos. Que nuestras familias, aun siendo señaladas, son en medio de la sociedad, un estímulo para recuperar la salud y la paz social que cada día más se añora”, exhortó el padre Óscar Chavarría.
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