Geraldina González C.
Exponernos por mucho tiempo al sol ocasiona que tanto la piel como el cabello luzcan resecos y poco atractivos.
La doctora Tania Aráuz Tinoco, dermatóloga de la Clínica Piel de Ángel, señala que el fotoprotector o protector solar es un agente que tiene la finalidad de proteger la estructura y preservar la función de la piel contra los rayos solares. Estos protectores pueden ser sistémicos y tópicos.
Los primeros, como los betacarotenos, aumentan la tolerancia al sol. Entre ellos encontramos el té verde y el Polypodium Leucotomos. Los protectores solares tópicos (los que se aplican), según su mecanismo de protección pueden ser agentes físicos y agentes químicos. Los físicos son aquellos que reflejan o dispersan la radiación con mínima absorción, y los químicos son sustancias que actúan por absorción de la radiación ultravioleta.
¿CÓMO ELEGIRLO?
Al momento de escoger un protector solar eficaz, la dermatóloga recomienda tomar en cuenta el tipo de piel que tengamos, verificar la presencia de filtros UVA y UVB, factor de protección solar y la resistencia al agua.
El protector debe contener los ingredientes de los filtros solares correspondientes, o bien espectro total, pantalla total o para radiación UVA y UVB.
De igual manera, verificar el factor de protección solar (FPS), el cual nos indica el número de veces que el fotoprotector aumenta la capacidad de defensa natural de la piel frente al eritema (enrojecimiento).
La resistencia al agua se refiere a la capacidad de los fotoprotectores de permanecer en la piel al entrar en contacto con el agua. Se dice que es resistente al agua cuando después de cuarenta minutos de inmersión continua, no ha perdido su capacidad protectora. Cuando la protección supera los 80 minutos se habla de un fotoprotector a prueba de agua.
APLICACIÓN
La dermatóloga explica que todos los fotoprotectores deben aplicarse de forma generosa sobre la piel media hora antes de la exposición solar, y según su resistencia al agua puede renovar su aplicación cada dos o tres horas.
En el caso de los niños mayores de dos años, se debe usar protector solar con FPS alto, preferiblemente en fluido o leche, y darles mucha agua para su hidratación.
CABELLERA IMPECABLE
Al igual que la piel, nuestro cabello se ve perjudicado por el sol, el viento e incluso la arena de la playa, agentes que provocan que luzca opaco y frágil.
Lizeth Gaitán, estilista profesional y propietaria de Delia’s Place Beauty Salón & Spa, comparte algunos consejos importantes para cuidar la salud de nuestro cabello y de esta manera poderlo lucir fuerte y con vida.
* Utilizar productos con protección ultravioleta (UV) nos ayudará a minimizar los daños que el sol puede ocasionarle a nuestro cabello, los cuales pueden ir desde resequedad hasta cambios en el color, ya sea natural o artificial. Este filtro UV lo podemos obtener de productos de cuido para coloración, como Color Save de SP, una línea específica para la protección del color.
* Aplicar mascarillas de hidratación. La estilista profesional señala que podemos combinar utilizando primero un champú para protección del color y luego una mascarilla para hidratación. Si no protegemos el cabello antes de entrar al agua, el daño causado por el cloro y la deshidratación serán evidentes.
Gaitán sostiene que aunque las mascarillas normalmente son para retirarlas de inmediato, hay algunas que nos permiten poderlas usar después del baño y dejarlas puestas para que nos sirvan como una barrera protectora. Asimismo, podemos usar sombreros o pañuelos para proteger nuestro cabello de los rayos agresivos del sol.
* Lavar el cabello después de exponerlo al sol. De esta manera contribuiremos a su hidratación. El lavado puede ser diario y dos veces al día. Nos podemos auxiliar de productos de peinado para después de la playa y la piscina, y así por la noche poder acondicionar nuestro cabello con productos que son de tratamiento portable como Potion 9, que contiene nueve aceites esenciales que ayudan a que el cabello recupere todos los emolientes que ha perdido durante el día.
* Evitar el uso de planchas y secadores. Es el tiempo ideal para llevar nuestra cabellera natural sin someterla a las altas temperaturas, pues eso únicamente contribuye a su deterioro.
* Elegir el tratamiento ideal. Antes de ir a la playa o a una piscina, Gaitán recomienda visitar a un estilista para realizar un diagnóstico del estado del cabello y solo después de esto elegir el kit de playa necesario.
En el caso de presentar puntas resecas, Gaitán recomienda recortarlas antes de someter al cabello al agua del mar o de la piscina. Asimismo, al regreso de las vacaciones de verano para retirar todo lo que se haya dañado y aplicar un tratamiento de reparación.
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