María Melba Calero
La hipertensión es uno de los principales factores que contribuye a causar cardiopatías y accidentes cerebrovasculares, que en conjunto representan la causa más importante de muerte prematura.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que la hipertensión provoca cada año casi 9.4 millones de muertes por enfermedades del corazón, y además contribuye a aumentar el riesgo de insuficiencia renal y de ceguera.
Una de las principales causas de esta enfermedad es el aumento de peso. De acuerdo con la OMS, los individuos con sobrepeso están más expuestos a padecer hipertensión que un individuo con peso normal.
Mejora tu dieta
La hipertensión no tiene cura, pero se puede controlar a partir de cambios en el estilo de vida, como realizar ejercicios, llevar una dieta apropiada, reducir el estrés y tener una medicación pertinente.
Con respecto a la dieta, la reducción de la cantidad de sales y grasas es fundamental para el organismo.
“Las personas hipertensas deben tener una dieta sana, pero la mayoría ingiere altas cantidades de sodio y esto provoca que a largo plazo los medicamentos no funcionen apropiadamente”, explica el doctor Daniel Meneses, cardiólogo intervencionista de la Clínica Cardiológica del Valle y expresidente de la Asociación de Cardiólogos de Nicaragua.
Un adulto debe consumir 1,500 miligramos de sodio al día; sin embargo, la sal no se identifica fácilmente. Aunque se evite usar grandes cantidades de sal en los alimentos que cocinamos, esta se encuentra en los procesados que normalmente ingerimos con frecuencia como los embutidos.
Cuatro puntos cruciales
A simple vista nos podría parecer un reto la selección de los alimentos adecuados para equilibrar la incorporación de nutrientes, vitaminas y minerales. Por eso, el doctor Meneses nos brinda cuatro puntos fundamentales que las personas hipertensas deben tomar en cuenta pa
ra mantener la presión arterial estable.
*Utilizar aderezos naturales en las ensaladas, como aceite de oliva o ajonjolí, jugo de limón y cualquier tipo de vinagres.
*Aumentar el consumo de fibras para que le ayuden al intestino fijar las grasas y azúcares que no son absorbidos por el cuerpo, sino eliminados en las heces. Las frutas y los vegetales son ricas fuentes de fibras.
*Reducir el consumo de lácteos, como queso, leche y crema, ya que contienen grandes cantidades de grasas, perjudiciales para la presión arterial.
*Reducir el consumo de frituras como las fritangas, porque normalmente fueron cocinadas con aceite reciclado y esto provoca un aumento de grasas no sanas para el organismo.
Ver en la versión impresa las paginas: 8