Julio Portocarrero Arancibia
Durante la celebración de la fiesta del Seminario Interdiocesano Nuestra Señora de Fátima, en Managua, monseñor Silvio Báez dijo “que el discípulo no puede olvidar que es discípulo del Crucificado que vence la cruz y crea un reino nuevo”.
En su homilía el obispo auxiliar de Managua explicó que “la cruz no es el dolor. La cruz es el dolor inevitable vivido con infinito amor y confianza en Dios”, e invitó a los presentes a aprender a vivir el sufrimiento para que otros no sufran. “El sufrimiento inevitable hay que vivirlo con el Crucificado”, dijo.
En ocasión de la fiesta del 97 aniversario de las apariciones de la Virgen María en Fátima, durante la Primera Guerra Mundial, Báez dijo que “María nunca fue tan creyente como en la cruz. Nunca (como al pie de la cruz) se iluminó con la luz de su fe”, resaltó Báez.
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