Los católicos de la ciudad de León celebraron una vez más la Gritería Chiquita o de Penitencia que se realiza todos los 14 de agosto, desde hace 67 años.
Luego de la misa, celebrada la tarde de este jueves, el obispo de León, monseñor Bosco Vivas, gritó: ¡Quién causa tanta alegría? Y los fieles devotos a una sola voz respondieron: ¡La Asunción de María! La actividad se da en agradecimiento a la Virgen María, a quien le atribuyen haber aplacado la erupción del Cerro Negro.
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