El papa Francisco denunció este viernes (hora de Filipinas) en Manila las “desigualdades sociales escandalosas” y proclamó su “rechazo firme a toda forma de corrupción”.
Hay que “romper las cadenas de la injusticia y la opresión que dan lugar a evidentes -y realmente escandalosas- desigualdades sociales”, lanzó el papa a las autoridades reunidas en el Palacio presidencial.
Es necesario que cada uno proclame su “firme rechazo a toda forma de corrupción que desvía los recursos destinados a los pobres”, añadió en su primer día de visita al archipiélago católico minado por la pobreza y los desvíos de riqueza.