El ministerio de música católica Jésed tenía más de una década sin venir a Nicaragua. El último encuentro con el público nicaragüense había sido en 2002, durante una campaña pro vida promovida por la Arquidiócesis de Managua. Así nació la canción No matarás al hijo en el vientre de su madre, recuerda Federico Carranza, vocalista y compositor de la agrupación.
Los integrantes de Jésed, que es la agrupación de música más escuchada de América Latina, con más de 51 álbumes y millones de copias vendidas, expresan que los años que lleva activo el ministerio han sido una bendición de Dios manifestada en las canciones que componen y en las personas que logran acercarse a Cristo por medio de ellas.
“Nunca nos imaginamos que floreciera tanto el grupo”, expresa Carranza, quien en todo momento es acompañado por su esposa Ana de Carranza, quien también es vocalista de Jésed y comparte: “Nosotros solamente somos un lápiz en las manos de Dios”.
Una de las particularidades de la música de Jésed es que sus canciones casi siempre se basan en las Sagradas Escrituras y el magisterio de la Iglesia. “Uno a veces siente la tentación de usar o no la inspiración personal, entonces siempre la usamos, pero en tercer grado”, expresa Federico.
Asimismo, compartieron cómo es el proceso para la creación de sus canciones. “Para componer se debe tener una vida sacramental activa, oración diaria, vivir en estado de gracia y componer ya propiamente es don de Dios”, expresa Ana.
Para Jésed, existe una gran diferencia entre ser artista y trovadores. “Nosotros no somos artistas, somos trovadores del Rey, me toca anunciarlo, el amor que tengo por el Señor”, confiesa Ana.