El tiroteo ocurrido en la Iglesia Africana Metodista Episcopal (AME) Emanuel, en Charleston, Carolina del Sur, una de las congregaciones negras más antiguas de Estados Unidos —donde murieron nueve personas por los disparos presuntamente del joven blanco, Dylann Roof, de 21 años—, revivió en la nación norteamericana el fantasma del racismo. El sospechoso ya se encuentra bajo custodia de las autoridades. El presidente Barack Obama recalcó que no es la primera vez que las iglesias de las comunidades negras del país han sido atacadas y anotó que este nuevo suceso plantea preguntas sobre una “parte oscura” de la historia de Estados Unidos. Más información PLANETA 12
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