La dentadura no solo sirve para mostrar la bella sonrisa que tiene, sino que son unos elementos más valiosos que le ayudan a masticar, desgarrar y triturar los alimentos, y por ende nutrir su cuerpo.
Además que tienen una función fonética dado que actúan como caja de resonancia y permiten articular sonidos, y por último, es parte de su estética; una boca sin dientes se ve arrugada y definitivamente añadirá un problema a su autoestima.
Recuerde que tener los dientes sanos y blancos ayudará a la persona a tener más confianza al sonreír, y eso da una sensación de limpieza y frescura al momento de conversar con alguien.
Es ahí la importancia de cuidarlos y tener una salud bucal impecable, y eso requiere mucho trabajo.
Unos dientes manchados, desgastado o con caries son un SOS para acudir al médico especialista.
MANCHADOS
Se ha preguntado por qué tiene los dientes manchados, si todos los días se lava los dientes.
La respuesta es sencilla. Se está lavando los dientes con una técnica inadecuada y eso provoca que sus dientes luzcan amarillentos u oscuros.
Otra de las causas más comunes de que sus dientes luzcan manchados es la mala elección de su pasta de dientes, la falta de uso de algunos productos esenciales para facilitar la limpieza de estos, y principalmente la poca visita a su odontólogo, que al final para muchos resulta una tortura, y deciden mejor no chequearse los dientes.
Otra causa de que sus dientes se manchen con facilidad o decoloren es debido a la formación del esmalte y provoca que las manchas sean uniformes o en algunas zonas. Esto indica que existen factores genéticos, congénitos (cuando nacemos), infecciosos y ambientales (lo que comemos o ingerimos), explica la odontóloga, Teresa Castrillo.
Como aborda la especialista, también se debe ser cuidadoso con lo que come o ingiere. El tabaco tiende a oscurecer la dentadura debido a su alto contenido de sustancias químicas que se pegan en las superficies de los dientes.
A eso hay que agregarle, los medicamentos como los antibióticos y el hierro (en el caso de los niños provocando que se pigmenten).
La edad, es otra de las causas por lo que los dientes cambian de color, debido a la mayor mineralización de la dentadura, afirma la odontóloga, Fidelina Juárez.
A LAVARLOS BIEN
Para tener una dentadura sana es importante que se cepille los dientes después de cada comida, esto evitará que la placa se forme, aparezcan caries y problemas en las encías, además de que se fijen las manchas.
Especialistas recomiendan utilizar la técnica horizontal, también conocida como el método del frotado, que consiste en movimientos suaves que van de izquierda a derecha.
Al lavar los dientes de atrás debe realizar movimientos verticales que van de abajo a arriba, aquí el mango del cepillo tiene que apuntar al techo.
Además de lavarse los dientes con una excelente técnica debe utilizar una pasta de dientes de calidad y de acuerdo con las necesidades de su dentadura.
HILO DENTAL
Después de lavar su dentadura, use hilo dental para que limpie las partes donde las cerdas del cepillo no pueden llegar, elimine la acumulación de comida y bacteria de entre los dientes. Esta herramienta está elaborada de plástico o nailon, y es un delgado hilo que coloca entre sus dientes y del que tira para limpiar esos espacios. Se debe utilizar a diario dado que las bacterias pueden provocar mal aliento, y tener comida o restos en los dientes puede hacerlos lucir menos limpios o blancos. Para las personas que utilizan aparatos de ortodoncia en la actualidad, usar hilo dental es vital.
VISITE AL ODONTÓLOGO
Además de lavarse correctamente los dientes, tres veces al día y utilizar el hilo dental es esencial que visite a su dentista, por lo menos una vez al año para realizarse una limpieza dental. Evite beber vinos tintos o café con frecuencia porque tienden a manchar más rápido los dientes y aliméntese bien, de paso trate de no consumir alimentos que contengan azúcar, explica la odontóloga Teresa Castrillo.
Según la Organización Mundial de la Salud “las caries dentales pueden prevenirse manteniendo de forma constante una alta concentración de fluoruro en la cavidad bucal. Ello puede conseguirse mediante la fluoración del agua de bebida, la sal, la leche, los colutorios o la pasta dentífrica, o bien mediante la aplicación de fluoruros por profesionales”.
Ver en la versión impresa las páginas: 4 B