Tratar al humano y no a la enfermedad es un buen mensaje para quien busca la cura ante la aparición de una enfermedad mortal como el cáncer.
Casi siempre, los pacientes, además de buscar procedimientos que los sanen, también tienen la necesidad de ser comprendidos, por eso es conveniente que se identifiquen con un médico que les brinde esa confianza que tanto necesitan.
Tener cáncer no es fácil, sin embargo, muchas veces con la asesoría médica adecuada usted puede mejorar su condición, es por eso que es recomendable escuchar una segunda opinión. Sí, así como lee. La segunda opinión, en centros médicos en Estados Unidos, es un servicio donde un equipo de médicos multidisciplinarios se reúnen para apoyar al paciente con cáncer y mostrarle las alternativas que tienen para mejorar su condición.
El oncólogo nicaragüense Marvin Díaz Lacayo es pionero en nuestro país en emitir una segunda opinión para aquellos pacientes que se les ha diagnosticado cáncer.
Aunque, reside en Estados Unidos, su propuesta de valorar al paciente y brindarle una segunda opinión, a través de una videoconferencia a la que él llama teleoncología, concibe que en nuestro país será todo un éxito, porque según él su opinión como especialista será de apoyo para trabajar en conjunto con el médico de base del paciente con cáncer.
El nicaragüense radicado en Estados Unidos se apoyará en realizar su segunda opinión en estudios y avances científicos internacionales que han dado pauta para que muchos pacientes que sufren de cáncer hoy salgan victoriosos de esta enfermedad.
¿EN QUÉ CONSISTE LA TELEONCOLOGÍA?
La teleoncología consiste en que el paciente, previamente valorado por su oncólogo de base y tenga la primera opinión, la cual ha sido valorada a través de resultados como: radiografía, resonancia magnética, mamografía, reporte de patología, entre otros estudios, luego serán enviados a través de correo electrónico al médico Marvin Díaz Lacayo, para ahondar en el diagnóstico, en el caso que haya vacíos en el expediente.
El oncólogo confiesa que la teleoncología es un nuevo servicio médico en Nicaragua, y con ello no pretende ser competencia de los oncólogos residentes en el país, más bien, su deseo es que en conjunto, y con los conocimientos que su experiencia le ha dado al trabajar en el ramo de la medicina en Estados Unidos por más de 40 años, se le brinde al paciente una segunda opinión. Una esperanza de vida.
Díaz Lacayo expresa que uno de sus objetivos, “además de practicar la teleoncología, es dedicarme a enseñar y transmitir mis conocimientos en las universidades y al personal médico que está en entrenamiento en los hospitales del país”.
El oncólogo confiesa que entre sus metas está equipar un centro donde se realicen radioterapias (que no existe en Nicaragua) y que ante esta situación los pacientes con cáncer deben viajar a Costa Rica u otros países para realizarse este procedimiento.
Por último manifiesta que al paciente al darle una segunda opinión a través de la teleoncología también se pretende darle alternativas a través de técnicas modernas para erradicar el cáncer que le aqueja.
“La función principal es proporcionar al paciente confianza en su médico oncólogo de cabecera, o de llenar ese vacío que no discutió con su médico base”, expresa Díaz Lacayo, quien terminó su especialidad de Hemato-oncología en 1975 en la Universidad de Miami, luego se desempeñó como director médico de Salick Cancer Center y ocupó la presidencia de la Conferencia de cáncer y la Conferencia de cáncer de mamas que se llevaban a cabo semanalmente en el Hospital del Aventura Regional Medical Center y en el Aventura Comprehensive Cancer Center.
SU LEMA
El oncólogo es sobreviviente de cáncer de garganta, al igual que su esposa, Alicia, por eso su lema de trabajo es:
“Tratamos al humano, no la enfermedad”.