Tras conquistar Alemania en Moscú (1-0) y poner otra pica en Rostov frente a Corea del Sur (2-1), México debe completar el trabajo ante Suecia para jugar los octavos del Mundial, este miércoles en Ekaterimburgo (8:00 a.m.,), sabiendo que un empate es suficiente para terminar como líder del grupo F.
México estuvo clasificado para octavos el sábado hasta que Toni Kroos acertó con un excepcional disparo en el 90+5 que dio el triunfo 2-1 a Alemania ante Suecia, provocando que las cuatro selecciones que forman la llave tengan opciones este miércoles.
Kroos y la decepción
El centrocampista del Real Madrid salvó a Alemania y llevó la decepción a nórdicos y norteamericanos, que ya se veían en la siguiente ronda desbancando a la vigente campeona “Inmediatamente después del partido, nos vimos todos deprimidos en el vestuario. El estado de ánimo se derrumba, pero hay un dicho: ‘caer, pero levantarse'”, señaló el delantero Marcus Berg.
“Nos enteramos en el aeropuerto, no habíamos hecho cálculos, más allá del resultado del Alemania-Suecia, sabíamos que en el último partido nos jugábamos el primer lugar”, dijo el arquero mexicano Memo Ochoa.
El Tri tiene 6 puntos, seguido de Suecia que tiene 3, como Alemania, y cierra Corea del Sur, que no ha sumado, pero a la que una victoria y una carambola de resultados la llevarían a octavos.
Gran oportunidad
Único equipo del Mundial no clasificado con dos triunfos, México podría alcanzar 9 puntos, su puntuación máxima en una primera fase de la competición, o quedar eliminado con 6.
Solo una vez México y Suecia se enfrentaron en un Mundial. Ocurrió hace 60 años, con el equipo nórdico como anfitrión, que ganó 3-0 en la fase de grupos antes de alcanzar la final y perder con Brasil, liderada por un adolescente llamado Pelé.