Rommel Caballero no ha tenido mucha suerte en sus primeros dos combates en el boxeo profesional. En su debut empató contra Eric Rodríguez por culpa de un cabezazo no intencional y en el segundo ganó por decisión, sin embargo terminó con un problema en su espalda. El 17 de agosto no desea ninguna piedra en el camino y con todo y la escasa información que posee de su oponente, el mexicano Jahaziel Vázquez, su entrenador y papá Marcos Caballero, pide dos cosas: “Fuerza y velocidad”.
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La preparación ha ido de bien a excelente, en un principio sentía un poco de dolor en la espalda, pero la mano de diferentes doctores funcionaron para menguar el dolor y entrenar sin problemas. A 14 días del combate, el cual será televisado por ESPN, según indicó Marcos Caballero, está en 132 libras.“A veces yo soy el que le digo que debe comer. Rommel es un muchacho muy disciplinado y eso lo llevará largo”, explica su papá. El combate será en 130 libras en el Spring Fantasy en Indio, California.
Su adiestrador está claro que en su tercera pelea no puede exigirle tanto. Sabe que muchas de las cosas las aprenderá con forme pase el tiempo, por eso no hay precipitación. “No tenemos un plan específico porque no he visto nada del oponente, trabajamos de manera general, en este nivel de competencia difícilmente se verá el mejor nivel de Rommel, pero eso es normal, con forme vaya peleando y se le exija más irá creciendo”, relató Caballero.
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Rommel espera con ansias el contrato promocional de Golden Boy. Su papá no está preocupado. “Es algo que suele pasar, muchas veces estas cosas se atrasan”, confiesa. Eso sí, el contrato de este combate ya está y será a seis asaltos ante un Vázquez que pierde siete combates y gana solamente dos en su carrera profesional.