Karla Yessenia Valladares Parajón, de 34 años, fue encotrada muerta el pasado martes en la casa que alquilaba en Villa Reconciliación, en Managua. La mujer tenía dos meses de embarazo y el principal sospechoso del crimen es su pareja Santos Antonio Benavides Soza, de 38 años.
El hedor que salía de la angosta casa que ambos alquilaban levantó sospechas entre sus vecinos. La mujer fue estrangulada con un mecate que el sujeto habría comprado en una pulpería del sector y que ocupó para amarrarla a una verja.
“Yo no los había visto desde el sábado que él (Santos) me sacó de la casa en la mañana”, expresó la adolescente de iniciales K.V.B.H., de 14 años, hija del sospechoso. La joven tenía un mes de vivir con su papá y su madrastra.
El hombre le dijo a su hija que se fuera dos días de la casa, por lo que ella presume que iba a discutir con su madrastra. “A lo mejor no quiso que yo escuchara. Me dijo que me fuera dos días para donde una señora y que el lunes yo iba a regresar”, expresó la adolescente.
Tres días seguidos la pequeña llegó a la casa para ver a su padre, sin resultado alguno. El martes que regresó, ella también sintió el hedor. Se subió a una verja. El viento levantó una cortina y fue cuando vio a su madrastra tirada en el piso.
“Yo nunca pensé que fuera eso. El viernes, ellos tuvieron una discusión y yo vi que él la estaba golpeando, ella tenía dos meses de embarazo”, relató la menor. “La tenía en la cama y la estaba ahorcando”, contó.
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El sábado que la joven se levantó fue que su padre le dijo que se fuera. Ella todavía miró a su madrastra que estaba empacando su ropa porque se iría. Vecinos aseguran que cada vez que el sujeto ingería licor se portaba violento. La última vez que lo vieron llegar a la casa fue el pasado lunes. “Solo muerta vas a salir de aquí”, la sentenció en una ocasión. La Delegación Seis de la Policía Nacional investiga el caso.
Vivía bajo violencia
La pareja tenía dos años de alquilar en ese sector. Según vecinos, en diciembre pasado la víctima estuvo con un pie fracturado ante la golpiza que le propinó su pareja.
La joven era originaria de León y dejó huérfana a una niña de siete años que vive en Costa Rica.