Héctor Antonio Mendieta Ortiz, guarda de seguridad del hospital El Maestro, en Diriamba, fue declarado culpable de homicidio en perjuicio de Wiston Javier Romero, de 21 años, quien recibió un disparo en la región lumbar cuando fue encontrado dentro de una bodega del hospital presuntamente para robar productos de limpieza el pasado 12 de abril.
Así lo dictaminó este lunes el titular del Juzgado de Distrito Penal de Juicio de la ciudad de Diriamba, Juan María Rivera. En el debate de la pena, el Ministerio Publico solicitó 15 años de prisión, en cambio la defensa solicitó dos años y medio por las atenuantes que favorecen al reo. La lectura de sentencia está programada para el próximo viernes 31 de agosto.
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Romero era inhalador de pega, entró de madrugada a una bodega del hospital y, al ser descubierto por el acusado, quien le advirtió que no se corriera, recibió el balazo.
La víctima era habitante del asentamiento conocido como El Hoyo, murió por una hemorragia masiva y daños en el riñón izquierdo.
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Catorce testigos fueron los que presentó la Fiscalía en todo el proceso judicial y la defensa representada por el abogado particular, Hermes Sevilla solamente contó con dos testigos. Además, se presentó un material audiovisual donde se le extrajeron las balas al fallecido.