Jonathan Moraga Palacios, quien estaba desaparecido desde hace ocho días, fue encontrado sin vida este martes en la hacienda conocida como La Moca, en el municipio de Dolores, Carazo. Un poblador de la zona hizo el hallazgo y dio aviso a la Policía Nacional, que trasladó el cadáver al Instituto de Medicina Legal (IML), en Managua.
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Los familiares de Moraga, de 21 años, lo reconocieron por la ropa que vestía y por dos tatuajes que tenía en los tobillos. El cuerpo de Moraga había sido devorado por aves de rapiñas y estaba en avanzado estado de descomposición.
El cuerpo fue echado en una bolsa plástica negra y cubierto en una sábana de color rosado, que llevaron sus parientes.
Golpe mortal
“Nosotros jamás pensamos que se llegara a ese extremo, teníamos la esperanza de encontrarlo con vida. No podemos presumir nada, la Policía se va a encargar del resto”, dijo un tío de la víctima.
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El informe preliminar de Medicina Forense indica que el joven murió por un politraumatismo craneoencefálico severo y de una hemorragia masiva ocasionada por un objeto contuso.
Momentos en que policías sacan de la hacienda cafetalera La Moca en Dolores, Carazo, el cadáver del estudiante Jonathan Moraga Palacios de 21 años, quien llevaba ocho días de desaparecido @laprensa @hoynoticias pic.twitter.com/UuT6oGzT3f
— Mynor Garcia (@Mynorjgn) September 4, 2018
Moraga vivía en el barrio Guadalupe, en Dolores, y estudiaba la carrera técnica de Mecánica industrial en el Centro Tecnológico Ernst Thalman en Jinotepe. La última vez que Moraga salió de su casa dijo que iba a jugar billar con unos amigos.
Los pobladores que llegaron a ver el cadáver se mostraron sorprendidos y atemorizados. “Es lamentable lo que le pasó al pobre muchacho que lo asesinaron, estoy sorprendida y adolorida como madre que soy, me parte el corazón. Él (Moraga) era un muchacho humilde que jugaba futbol ahí en la calle con sus demás amigos”, dijo Gladys Tardencilla.
Autoridades de la Alcaldía Municipal se presentaron a la zona que ahora pobladores tildan de peligrosa. La Moca es una hacienda cafetalera que se ubica a orilla de la carretera Panamericana entre la ciudad de Dolores y Jinotepe. Esa vía es bastante transitada de día y de noche por peatones y vehículos.
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En los postes del tendido eléctrico y en algunos negocios, los familiares habían pegado unas papeletas con tres fotografías de Moraga con dos números telefónicos para recibir información, sin embargo estos nunca sonaron.