La excesiva presencia de la Policía Orteguista este viernes en el cementerio de Granada, así como la instalación de toldos para repartir café y sonar música cristiana por parte de la Alcaldía, fue criticada por la población que llegó a conmemorar el Día de los Difuntos. Los ciudadanos percibieron que los orteguistas querían mostrar un clima de aparente calma y “solidaridad”.
“Hemos visto hoy (viernes) grupos de policías regados por todo el cementerio. También a miembros de la Juventud Sandinista y a los políticos de barrios. Ya ni visitar tranquilos a nuestros muertos podemos”, criticó el ciudadano Carlos Miranda, quién junto a su familia visitaba las tumbas de sus difuntos.
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La alcaldesa Julia Mena Rivera y el vice alcalde, Pedro Vargas Mena, llegaron por un momento a la tradicional misa que se ofició en la capilla de Ánimas de dicho camposanto. Esta vez el obispo Jorge Solórzano, no presidió el acto religioso en el cementerio.
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En las primeras horas de este viernes, el cementerio de Granada estuvo bastante concurrido, pero por la tarde se incrementó la afluencia de deudos. Evert Marenco, subcomandante del Benemérito Cuerpo de Bomberos de Granada, manifestó que no se registró ninguna emergencia, pese al calor que hizo en la ciudad.