Los Estados partes del Mercado Común del Sur (Mercosur) y los Estados Asociados de Chile, Colombia, Ecuador y Perú, manifestaron su preocupación por el agravamiento de la situación en Nicaragua, en medio de la crisis por la represión policial y paramilitar contra las protestas civiles, que este martes cumplió ocho meses desde su inicio y demandaron el restablecimiento de las garantías civiles y políticas a los ciudadanos.
Mercosur está integrado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, más los Estados asociados. Estos países reiteraron su condena a los hechos de violencia que han provocado entre 325 y 535 muertos, según diferentes cifras de organismos de defensa de derechos humanos.
También hicieron “un llamado al Gobierno de Nicaragua para que permita trabajar libremente a los mecanismos nacionales, regionales e internacionales de protección y promoción de los derechos humanos, incluyendo la investigación de todos los hechos de violencia ocurridos desde el inicio de las manifestaciones populares el 18 de abril pasado”, e “instan al Gobierno de Nicaragua a desarticular las organizaciones paramilitares, restableciendo plenamente las garantías civiles y políticas en el país y asegurando la libertad de expresión del pueblo nicaragüense y su derecho a manifestarse libremente”.
Exhortaron también al Gobierno de Nicaragua a “retomar sin dilaciones el camino del diálogo para encontrar una solución pacífica y negociada, que devuelva al pueblo nicaragüense el pleno goce de sus derechos civiles y de sus libertades fundamentales”.