Que Daniel Ortega permita el ingreso inmediato de la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) a Nicaragua es el planteamiento que mañana llevará al Gobierno el equipo negociador designado por la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia.
La idea es que ambos organismos internacionales participen como garantes en la mesa de negociación que se instalará mañana en Managua, para buscar una salida a la prolongada crisis política que atraviesa el país desde el 18 de abril del año pasado.
Lea además: Alianza Cívica escuchará a familiares de víctimas de la represión
Azahálea Solís, integrante de la Alianza Cívica y miembro suplente de Carlos Tünnermann, explicó que en el inicio del Diálogo Nacional se enfocará en conocer las propuestas y la dinámica del proceso por las partes.
Sobre los organismos internacionales que la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia propondrá para el diálogo, Solís expresó que son varios, sin precisar los nombres.
“El miércoles ya quedará definido cómo se va a estructurar toda la dinámica del diálogo, para eso será ese primer encuentro. Nosotros llevamos nuestras propuestas de garantes, que son varios, y el Gobierno también hará las suyas, imagino”, explicó Solís.
Puede leer: Embajador del papa en Nicaragua: “Hay que darle confianza al diálogo, porque no hay otra alternativa”
No obstante, dos fuentes de la Alianza Cívica confiaron a LA PRENSA que los garantes que serán propuestos para que participen en el proceso de diálogo son la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
“Si no hay garantes de calidad como la OEA y la ONU, entonces serían acuerdos firmados en papel mojado, o sea no valen nada”, dijo una de las fuentes, que pidió no ser nombrada.
Solís, sin embargo, sostuvo que la propuesta de la Alianza Cívica recoge todas las demandas de la población, que se basan en libertad, justicia y democracia.
También: Roberto Zamora, presidente de Grupo Lafise: Nicaragua está entrando en una “fase crítica financiera”
Otro de los puntos que aún se debaten entre las partes es el lugar donde se llevará a cabo el proceso de conversaciones.
El analista político José Dávila aseguró que la calidad y transparencia de los garantes marcará el cumplimiento de los acuerdos.
“Definitivamente los garantes son fundamentales, son piezas clave para que este diálogo cumpla con las exigencias que la población demanda, como es justicia y democracia”, aseveró el exdiplomático.
Dávila, quien es parte de un “grupo de reflexión” que envió una propuesta de temas a la Alianza Cívica, aseguró que si Ortega rechaza a los garantes que planteará la Alianza, lo mejor sería retirarse del diálogo.
“Los puntos que hemos exigido (como grupo de reflexión) son libertad de presos políticos, restauración de las libertades públicas y las elecciones adelantadas; pero esos acuerdos deben ser garantizados con garantes reconocidos, por eso insistimos que la presencia de los garantes de la OEA, la ONU y la Unión Europea garantizará nuestras demandas”, refirió Dávila.
En el primer intento de diálogo, en junio del 2018, no participó ninguna organización internacional como garante de las conversaciones, lo que fue aprovechado por Ortega para esquivar cualquier compromiso que implicara el cumplimiento de las demandas de la población, que exige reformas institucionales y adelanto de elecciones.
Puede leer más en: Alianza Cívica: La libertad de los presos políticos es de prioridad en la negociación con Daniel Ortega
Ortega llega al proceso de conversaciones este miércoles con la Alianza Cívica, acusado por la sociedad civil y organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales de promover una brutal represión entre los meses de abril y julio pasados que ha dejado entre 337 y 547 personas muertas por la represión de la Policía Orteguista y paramilitares, a quienes Ortega llamó “policías voluntarios”.
El país se hunde y también el régimen
Dávila opinó que si Ortega quiere condicionar el diálogo y rechazar garantes solo va a empeorar el desarrollo “ya estancado” para Nicaragua.
“A estas alturas Ortega debe considerarse él mismo con este diálogo, sin embargo, si rechaza a los garantes, el diálogo no tendría sentido y seguiría el proceso de hundimiento del país, continuará el proceso de hundimiento del régimen; seguirá el proceso de sanciones y Nicaragua se seguirá hundiendo en la incertidumbre y la angustia”, recalcó Dávila.
Quiénes son los representantes de la Alianza Cívica en el Diálogo Nacional
Por su parte, el excanciller de Nicaragua, Norman Caldera, expresó que Ortega no está en condiciones de rechazar propuestas y que la posición de la Alianza Cívica debe ser firme.
“(Ortega) no está en condiciones de rechazar garantes y la Alianza también puede exigir lo propio. Son dos las partes”, explicó Caldera.
El excanciller insistió que en un diálogo lo normal es que las partes propongan, pero si una de ellas se opone sencillamente se paraliza el proceso.
“En un diálogo de dos, los dos tienen derechos, uno propone y el otro puede no aceptarlo y si no aceptan, allí se pueden morir las negociaciones”, indicó Caldera.
Se escuchará a víctimas de la represión
Por otra parte, Mario Arana, presidente de la Cámara de Comercio Americana de Nicaragua (Amcham), aseguró la noche del domingo reciente que el equipo negociador de la Alianza Cívica escuchará a los familiares de las víctimas de la represión durante las protestas cívicas.
Según Arana, el equipo negociador no representa a sectores específicos y describió el papel de este, integrado por seis titulares con sus respectivos suplentes, como “interlocutores de los intereses de los nicaragüenses”.
Anillo de consultas
Sobre las demandas de las organizaciones de familias de asesinados, presos políticos y exiliados, que pidieron participar en el diálogo, el presidente de Amcham explicó que “habrá un anillo de consulta para asegurar que esas voces estén presentes en la negociación”.
Arana dejó ver que el inicio de estas negociaciones con Daniel Ortega son frutos de la resistencia cívica y la presión de la comunidad internacional.
“La resistencia activa de los nicaragüenses y la presión internacional nos han traído a este punto”, dijo Arana.
Busca neutralizar aislamiento y sanciones
En una carta abierta a la Alianza Cívica, el excomandante de la revolución Luis Carrión Cruz expresa que Ortega cede al diálogo porque está débil y por las presiones internacionales, porque su política de represión “y su narrativa de golpe de Estado han fracasado”.
Carrión advierte que Ortega no acude al diálogo de buena fe, sino que “buscará neutralizar el aislamiento y las sanciones internacionales, preservar su poder y mantenerse en la Presidencia hasta el 2021”.
Mata dice que Ortega no tiene confianza en CEN
El papel de los obispos, quienes en el diálogo de mayo pasado fueron mediadores y testigos, aún no está claro en este proceso, sin embargo, una fuente oficial explicó a LA PRENSA que estos solamente acudirán como testigos.
Hasta ahora, solamente se conoce que el cardenal Leopoldo Brenes y el obispo de la Diócesis de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, junto al nuncio Waldemar Sommertag participarán por la Iglesia católica.
El secretario general de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), monseñor Abelardo Mata, explicó que su participación como testigos es porque “el gobierno no tiene confianza en ella (Conferencia). Eso es claro, a ojos vistas. Se pidió que solo se fuera en calidad de testigos, oir, ver, testimoniar”.