Vuelve al escenario la tragedia clásica de Antígona escrita por el poeta griego Sófocles, nacido en el año 496, antes que Cristo.
Su estremecedora historia está basada en un intenso drama de sangre, amor, peleas por el poder, rebeldía y la muerte con “honor”, y será llevada a escena por estudiantes universitarios desde una mirada del teatro contemporáneo.
Además en sus intensas escenas, los estudiantes develarán las consecuencias nefastas del autoritarismo de Creontes, rey de Tebas; y de su falta sensibilidad al no eliminar un decreto que prohíbe a uno de los familiares enterrar su muerto, orillándola al suicidio.
Esta obra será estrenada, el martes a las 3:00 p.m., en la Sala de Cultura Lizandro Chávez Alfaro, de la Universidad Centroamericana.
Pero ante la falta de seguridad que se vive en Managua, la anormalidad de las actividades y el constante asedio policial a esta universidad, la puesta en escena será solo para estudiantes, profesores y trabajadores de esta Alma Mater y en horas de la tarde, observaron sus promotores culturales.
Dirección y elenco
“Tendrá su toque griego, pero será modernizada por los jóvenes de la Universidad Centroamérica, UCA ”, destaca Alicia Pilarte, directora del TEUCA (Teatro Universitario de la UCA).
Creonte, será estelarizada por el estudiante Jorge Vanegas; Antígona, por María Guadalupe del Carmen; Hemón (hijo de Creonte) por Alexander Alonso; Ismena (hermana de Antígona), por Liduska Pacheco; y Diresias, el adivino, por Norvin Guevara, explicó Pilarte.
“Antígona representa, desde Sófocles, la heroína capaz de arriesgar su propia vida por los valores éticos más elevados, como símbolo de resistencia contra cualquier forma de tiranía”, destacan en su sinopsis.
Pelea por el poder, dolor, luto y muerte
Este drama trágico está basado en una historia de Sófocles que fue traducida al español por el dramaturgo Daniel Pérez Guerrero.
Después de la muerte de los hermanos Eteócles y Polinice (que perecen pelándose por el poder), el temible y autoritario rey Creonte “manda darle sepultura y honras fúnebres al primero, y al otro tirarlo al campo, considerándolo traidor, para que se lo coman los zopilotes”
Antígona, su hermana se llena de valor y decide enterrarlo en contra de la orden dictatorial de Creonte. Ismena, su hermana tiene miedo de acompañarla.
Antígona es apresada y llevada al emperador que la condena a muerte. Para sorpresa Hemón, es el novio de Antígona, pero a la vez es el hijo del tirano.
En escena aparece el adivino Diresias, quien anuncia terribles presagios. Hemón busca que su padre derogue el decreto de muerte, pero le es negado.
La bella y angustiada Antígona se quita la vida como un acto de honor, ante el fin que le tenía preparado el tirano. El derrame de sangre alcanza otros ribetes. Un adivino anuncia presagios y un coro le pide que rectifique.
El joven sigue el mismo camino que Antígona. La adolorida reina madre al conocer los sangrientos hechos, se hunde una espada y muere.