María Núñez Gutiérrez narró este viernes el calvario que vivió su hermana Karla Vanessa Núñez desde 2012 hasta que fue asesinada el pasado 19 de junio. La Fiscalía acusa a su esposo Sergio Antonio Matamoros de ser el autor intelectual. El testimonio lo hizo ante la juez Fabiola Betancourt en el inicio del juicio en contra de Matamoros.
La hermana de la víctima, testigo de la Fiscalía, declaró que su hermana se juntó con el acusado en 2001, se casaron a escondidas y este empezó a controlarla, celarla y darle maltrato psicológico y hasta físico a partir de 2012. “En el 2012, el esposo (Sergio Matamoros) le puso un cuchillo en el cuello (a Karla Núñez) y le quemó la ropa”, aseguró.
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La testigo manifestó que su hermana, de 40 años de edad, quien al momento de su muerte era supervisora de televentas de Cargill-Nicaragua, salía a trabajar fuera de Managua, y él la seguía y la buscaba hasta en horas laborales porque decía que tenía otra pareja.
La hermana de la víctima, aseguró que Karla Núñez, cansada de tanto maltrato psicológico y físico de parte de esposo decidió separarse de este el 18 de enero de 2018, y cuando ella intentó divorciarse en mayo de 2019, fue que él decidió matarla y para ello planificó el crimen, sin importarle que tuvieran dos hijos.
Simularon robo para matarla
El crimen de Karla Núñez ocurrió la tarde del 19 de junio de 2019, en la comunidad San Pedro, del cementerio 150 metros al oeste, sector del kilómetro 16 de la Carretera a Masaya, y según la Fiscalía, para no crear sospechas de que su esposo Sergio Matamoros la mandó a matar, los asesinos simularon un robo.
Los acusados de asesinarla y robarle las pertenencias a la víctima, según la Fiscalía son: Norlan Sandino Balitán y Martín Rivera González señalados como autores del asesinato y robo. Sergio Matamoros, esposo de la víctima Karla Núñez, es acusado como autor intelectual de femicidio.
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El abogado Manuel Nicaragua, defensa del acusado, dijo que cuenta con testigos y documentales que presentará en juicio con los que demostrar que su representado Sergio Matamoros no tiene nada que ver en el crimen de su esposa.
La defensa le expresó a la judicial que quedará en evidencia que el día que la víctima fue asaltada y después asesinada, ella iba con su esposo Sergio Matamoros, quien conducía la camioneta, y al verla que la balearon le prestó auxilio y que fue él quien la llevó al centro hospitalario de Ticuantepe, para tratar de salvarle la vida.
Víctima quería divorciarse y le costó la vida
Según la Fiscalía, cuando en mayo de 2019 el acusado se enteró que Núñez quería divorciarse de él debido a sus celos enfermizos y los constantes maltratos físicos y verbales que recibió durante más de seis años, el supuesto agresor decidió matarla.
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La fiscal Yubelka Pérez manifestó a la juez Betancourt que con la prueba que presentará durante el juicio demostrará que el 6 de mayo de 2019, Matamoros planificó la ejecución de la muerte de la víctima Karla Núñez, que el acusado se reunió con su hermano de crianza Norlan José Sandino Balitán, a quien le propuso que buscara personas para ejecutar el asesinato de su pareja.
Para que su hermano de crianza sintiera que el plan iba en serio,Matamoros le entregó 200 dólares como adelanto de los 3,000 dólares que le pagaría una vez consumado el asesinato.
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La mañana del 28 de mayo de 2019, Matamoros se reunió con su hermano de crianza, en cuya reunión supuestamente estuvo también Martín José Rivera González. Ese día, el acusado les anunció que a la persona que iban a privar de la vida era a su esposa y les entregó a los tres sujetos la cantidad de 500 córdobas a cada uno.
Pistolero compró un revólver
Para ejecutar el asesinato, el hermano de crianza compró un revólver; por su parte, Martín Rivera usaría su moto para darle seguimiento a la víctima, quien generalmente se movilizaba en su vehículo, ya sea para sus actividades personales y para ir a sus labores.
El 19 de junio de 2019, a eso de la 1:40 de la tarde, la víctima iba en su camioneta en el asiento del copiloto y su esposo, el acusado, conducía el vehículo. Se dirigían al trabajo de la víctima.
El acusado había acordado con los demás sujetos que transitaría por una calle despoblada y poco transitada e ingresó a la comunidad San Pedro, del cementerio 150 metros al oeste, sector del kilómetro 16 de la Carretera a Masaya.
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Cuando redujo la velocidad de la camioneta en un reductor de velocidad, eso fue aprovechado por los otros dos sujetos, quienes viajaban en una motocicleta interrumpieron el paso de la camioneta. Simularon que era un robo y les quitaron sus pertenencias a ambas.
Como la víctima se opuso al robo, Martín Rivera realizó tres disparos: uno penetró en el antebrazo derecho y los otros dos en el tórax, que le perforaron ambos pulmones y una arteria. La víctima fue trasladada al hospital de Ticuantepe, pero llegó sin vida.
Un acusado pasó a ser testigo de la Fiscalía
En el inicio del proceso, Nerys Ariel Hernández, había sido acusado como encubridor en el caso. Ahora Hernández es testigo de la Fiscalía.
Antes de iniciar el juicio este viernes, Hernández declaró que había recibido amenazas de los demás acusados, si declaraba en contra de ellos.
En su declaración, aseguró que en mayo de 2019 se reunió en una gasolinera de Nindirí (Masaya) con Norlan Sandino y Martín Rivera, quienes le iban a ofrecer un trabajo y que al lugar se presentó a bordo de una camioneta un señor canoso, alto y delgado (Sergio Matamoros) y que los dos hombres que lo habían citado se acercarona él y él les entregó un dinero.
Hernández, además, dijo que el 23 de julio, más de un mes después del femicidio, llegó Martín Rivera, y le entregó el celular de la víctima para que lo vendiera y desapareciera.
Después que declaró la hermana de la víctima, la juez Betancourt suspendió el juicio a petición del abogado Francisco Reyes, defensa de Norlan y Martín, quien dijo que estaba enfermo y no podía continuar en el juicio.
La judicial programó la continuación del juicio para el próximo 25 de octubre a las 9:20 de la mañana.