Por su novedoso collage “Me guardo del CoronaChicle”, una pieza de arte que ironiza el coronavirus, la pintora nicaragüense Karla Cecilia Rodríguez fue seleccionada junto a 175 artistas de Estados Unidos y otros países, para ser parte de la exposición virtual “World Of Tommorrow” (“El mundo de mañana”) del Museo de Familia Walt Disney, en California.
“Fui clasificada representando a Nicaragua y para mi es un gran orgullo” expresa Rodríguez. Su obra se encuentra a la entrada del museo virtual a la mano derecha, junto a la par de la obra “Good morning” de Marc Sisquella Cucurell de Barcelona; y de “Apples and honey, spring” de Amy Nelder de San Francisco, California, Estados Unidos.
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En los últimos cinco años Rodríguez se ha dedicado a pintar sus obras en la técnica collage y exponerla en otros países con buenos resultados, y a partir de la pandemia se ha sentido motivada realizar composiciones como su actual pieza en exhibición en el museo.
Esta obra anteriormente fue exhibida en Nicaragua en la galería virtual del Instituto Nicaragüense de Cultura Hispánica (INCH) en la exposición “Arte desde el confinamiento”, promovida por René González. Fue mostrada en la plataforma artsteps junto a otros artistas nicaragüenses reconocidos.
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Recientemente también se sumó a la exposición “Mascarillas solidarias” también en el INCH, promovida por la artista guatemalteca Ana Liska de Nuyens, y en la que participaron 250 artistas de Centroamérica.
“Me guardo del CoronaChicle” ahora se exhibe físicamente en feria de artes
La valiosa pieza “Me guardo del CoronaChicle”, de Rodríguez ahora se exhibe físicamente en la Feria de Artes Visuales Nicaragüenses del Centro de Arte Fundación Ortiz Gurdian, inaugurada con visitas presenciales este domingo, 15 de noviembre.
En esta feria participan 101 artistas plásticos con pinturas, grabados, esculturas, dibujos, fotografías, cerámicas, collage, ensamblaje y textiles. Las obras estarán al público del 16 de noviembre al 18 de diciembre.
Al comentar su pieza, “Me guardo del CoronaChicle”, la pintora dijo que “siempre se ha representado a los zapatos como un accesorio positivo, pero ahora son una amenaza: deben limpiarse o dejarse afuera para combatir este virus”.
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Asimismo dice que “el chicle en la suela simboliza al virus, que siempre está en movimiento, y puede atascarse y viajar con usted”.
También los ve como “los números en la suela representan al número de muertes, sobrevivientes, personas que ayudan o días encerrados en cuarentena”.
Además comentó que en su familia han tomado las precauciones necesarias y que no ha habido muertes, pero si ha tenido amigos que han sido afectados por el virus, el cual continúa afectando a la humanidad.
Karla Cecilia Rodríguez
Karla Cecilia RodríguezParte de sus obras aluden a recreaciones de composiciones de corridas de toros, sobre el medio ambiente y la figuración contemporánea. En 2009 sus obras fueron incluidas en el catalogo de Fine Art America. Al año siguiente en libro “Artistas mujeres contemporáneas”, junto a pintoras de Europa y América Latina.
“En mis pinturas expongo mis ideas en una gama de negro, rojos y azules, con mucho cambio y sentimientos, que van del impresionismo al abstracto social en una etapa intermedia que me define”, dice la artista al valorar su arte.
El pintor y muralista, Reynaldo Hernández, quien fue uno de sus primeros maestros dice que las obras de Rodríguez exploran, “desde bodegones, tauromaquias sevillanas, abstractos con alusiones a la ecología.
Sus trazos de pinceles y espátulas son de colores vibrantes y limpios”. Rodríguez también fue discípula en 2006 del pintor catalán, Jon Ander del Arco,Jaime Hernandez de la Torre, Sonia de Franceschi, entre otros. Fue seleccionada en la VII Bienal de Artes Visuales Nicaragüenses.
“Vivir en colores” y en libertad
“Vivir en Nicaragua y ver los paisajes coloridos es como abrir la caja de crayones de nuevo” que solía hacerlo cuando era niña, expresa en su declaración de artista.
Habla de la evolución y lo vivo de la pintura en sus sentimientos expresados a través de colores que le inspiran, de gran fuerza tonal y vivacidad.
Para Rodríguez “vivir en colores”, es también crear piezas contemporáneas con alta sensibilidad social, tan necesaria en nuestros actuales tiempos.
Gusta experimentar constantemente en las técnicas del óleo, acrílicos y otros materiales como la arena arena, mármol, piedra, papel, pegamento y otros materiales de reciclaje.
En lo personal le preocupa la crisis sociopolítica que actualmente vive el país, así la severa crisis económica acrecentada por la pandemia.