No es lo mismo destacar o ser constante en un equipo de la Primera División de Letonia y Costa Rica, a brillar en la Liga Primera y tres partidos internacionales que muchas veces son impredecibles. Por eso Ariagner Smith, Byron Bonilla, Francisco Flores, Jason Ingram y Juan Barrera, en ese orden, son los mejores futbolistas nicaragüenses del 2020. El ranking se elaboró con base en sus estadísticas, logros particulares y tomando en cuenta la Liga donde participó cada uno.
Ariagner Smith. El somoteño destacó como nunca en el Spartaks de Letonia. Smith estableció una marca goleador para un nicaragüense en Liga extranjera con siete goles, más cuatro asistencias. Los tantos marcados superaron el registro de un nacional en el exterior de Byron Bonilla (6) en 2018, aunque lo hizo en la Liga de Ascenso tica y no en una de primer nivel. En un campeonato de Primera División el récord lo compartían Raúl Leguías (4) con los Bravos do Maquis de Angola en 2012 y Juan Barrera (4) en el Comunicaciones de Guatemala en el 2016. Smith disputó 26 de 29 partidos —el 89 por ciento— en Letonia: 27 de Liga y dos de Copa saliendo 20 veces de titular.
Byron Bonilla. El granadino marcó un gol y dio tres asistencias en el 2020, aunque es el único que militó en equipos importantes. Es segundo del ranking porque jugó menos partidos que todos (61 por ciento) y quedó campeón. En los primeros seis meses del año disputó 10 encuentros de 26 con el Saprissa. Sumó puntos a su favor al desequilibrar el partido de ida de la semifinal dando una asistencia y participando en otro gol de los tres del equipo. No volvió a figurar más pero levantó el título. Después se pasó al Cartaginés y volvió a destacar en la semifinal dando dos asistencias y desaparecer en el segundo desafío cerrando el torneo con 18 duelos: 15 de titular y solo uno completo. Su registro del año fue 27, de 44 partidos disputados y solo 19 de titular.
Francisco Flores. El lateral izquierdo presenta el segundo mejor registro ofensivo de todos con dos goles y tres asistencias en el futbol tico. A inicio el año le pasaron factura las lesiones, sin embargo cuando se recuperó volvió a ser importante en el Jicaral, sobre todo en este torneo en el que más brilló con un gol y dos asistencias disputando los 16 partidos de titular, aunque solo 15 completos. Flores fue el tercer jugador del futbol costarricense con más minutos jugados (1,395) y el defensor con más disparos al marco (13). Flores estuvo en 27 de los 38 encuentros (71 por ciento) del año con 24 de titular.
Jason Ingram. El blufileño no marcó gol y dio una asistencia en 30 de los 38 duelos disputados (78 por ciento) en el año en la Primera División de Costa Rica. El jugador del Santos de Guápiles alcanzó su mejor torneo (lleva cuatro) finalizando como el jugador con más minutos jugados (1,428) en el futbol tico. Ingram jugó de titular todos sus partidos —en 26 disputó los 90 minutos— y de esos, 22 fueron de forma consecutiva, un récord para un nica en el extranjero.
Juan Barrera. Las lesiones afectaron el rendimiento del ocotaleano, que pasó casi inactivo los primeros meses del año. Lo mejor de Barrera se dio de agosto a septiembre que marcó 13 goles en 18 partidos (81 por ciento) de la Liga Primera para llevarse su primer título de goleo. Después de pasar dos meses sin anotar volvió a aparecer cuando más lo necesitó el Real Estelí, descontando contra Alajuelense en la Liga Concacaf, abriendo el marcador en la remontada ante Motagua que finalmente ganaron en penalti para regresar a la Liga de Campeones.
